
Es común oír que hace unos cinco años surgió una nueva ola de comedia (y comediantes) que se desligaron de lo que para entonces era el humor mediático, perteneciente a cadenas televisivas o radiales. Claro, esa es una de las tantas consecuencias del Internet como medio. Para esa época comenzaron a proliferar en redes sociales videos de hombres hablando, contando chistes (pesados, para lo que se acostumbraba) y hablando “a calzón quitao”.
‘Con ánimo de ofender’ era el nombre de tal propuesta que, sin tener más producción que una cámara y una luz (siempre se grabó en las noches y en las calles), ganó relevancia y popularidad en las redes sociales. 126 fue el número de capítulos que salieron al aire. Durante los meses más álgidos de la pandemia del virus Covid-19 pausaron y comenzaron, paulatinamente, a surgir proyectos paralelos cuyo desarrollo y estallido se dio tiempo después.
Camilo Sánchez, Gabriel Murillo, Franko Bonilla, Duván Gómez, Ibrahim Salem, Camilo Díaz, Deivis Cortés, Camilo Pardo y Óscar Suárez son algunos de los nombres más destacados de entonces. Algunos de ellos hacen hoy parte de producciones humorísticas como Fucks News, Francamente Franco o ‘Por la ventana’.
Por la ventana... humor sobre ruedas
Este último formato tiene la particularidad de hacerse desde un carro, vehículo viejo con una que otra falla en la puerta del copiloto, obligando a los invitados a entrar por la ventana. Por allí han pasado figuras como Julián Román o Hassam, así como habitantes de calle relatando sus experiencia con el bazuco y la indigencia.
Su público es leal y así lo demuestran en los comentarios y el proceso de difusión y viralización de los contenidos. Tras un intercambio de mensajes, llegaron (en su icónico carro) a la cabina de Kienyke.com para dialogar con ‘El Metalero’, en clave de humor, pero haciendo énfasis en su trayectoria como humoristas, desde CADO hasta este nuevo formato.
El carro, fundamental para entender el concepto del programa, tiene un símbolo que lo dota no solo de autenticidad, sino de polémica. En letras rosadas y ocupando todo el costado derecho del vehículo, se resalta la palabra “Justicia” y un símbolo feminista. Esa marca la hicieron mujeres feministas en medio de una manifestación de reivindicación de género.
El ataque lo entiende Camilo Díaz como una represalia por algunos de los chistes que decían integrantes de CADO durante el programa. No es la primera vez que representantes de estos colectivos atacaban a los humoristas del formato virtual de comedia callejera.