El senador brasileño Chico Rodrigues (del partido Demócratas, centro-derecha) volvió al trabajo este jueves tras cuatro meses fuera del cargo, después de que fuera pillado por la policía en su casa escondiendo casi 30.000 reales (más de 5.500 dólares) en sus calzoncillos y entre las nalgas.
En una carta dirigida a sus colegas senadores este jueves, Rodrigues reafirma su inocencia y asegura que en aquel momento "entró en pánico" y no consiguió mantener "el comportamiento de equilibrio más adecuado", pero que el dinero tiene un origen lícito, compatible con su patrimonio.
El senador, que representa al estado de Roraima (norte) fue encontrado, por agentes de la Policía Federal, con más de 30.000 reales (5.400 dólares) en sus calzoncillos, al ser objeto de una operación que investigaba desvíos de recursos públicos destinados al combate a la pandemia del covid-19 (enfermedad provocada por el nuevo coronavirus).
Tras la operación, el Tribunal Supremo Federal ordenó el cese del senador durante un tiempo, pero el propio Rodrigues se adelantó y se retiró durante cuatro meses; pasado ese periodo, regreso a su rutina parlamentaria.
Mientras que en su carta de dimisión, Rodrigues volvió a defender su inocencia: "En un acto impulsivo, despertado por la Policía Federal, en pijama, asustado con la presencia de extraños en mi cuarto, desgraciadamente tomé la decisión más irracional de toda mi vida (esconder dinero en su ropa interior)", justificó.
"Ahora estoy siendo linchado por tener conmigo dinero lícito procedente de la actividad familiar empresarial", explicó el senador, sin concretar cuál sería el origen del dinero.
Según la prensa local, el regreso del político al Senado causó cierto malestar entre sus colegas, que ahora se sienten presionados en convocar el Consejo de Ética, un órgano que no funciona desde hace más de un año y que podría anular el mandato del senador.
¿Qué dijo el presidente Bolsonaro sobre este episodio?
Jair Bolsonaro intentó distanciarse del escándalo que causó este hecho, acusando a la prensa de asociarle la polémica y remarcando que Rodrigues no pertenece a su Gobierno, a pesar de que fue Bolsonaro quien le nombró como representante en el Senado en marzo del año pasado.
Días después haría oficial la destitución de Rodrigues, quien está de vuelta en el legislativo.