Los estragos del cambio climático ya son una realidad en una gran parte de los ecosistemas del mundo. La comunidad científica se encuentra en alerta luego de que se evidenciara un aumento acelerado de flores en la Antártida, región caracterizada por sus frías condiciones que impiden el crecimiento de flora.
Un estudio realizado por expertos de la Universidad de Insubria reveló que las especies vegetales Colobanthus quitensis y Deschampsia antarctica se han extendido en dirección proporcional al crecimiento de la temperatura en el planeta.
"Presumimos que la sorprendente expansión de estas plantas se debe principalmente al calentamiento del aire del verano y la liberación de la limitación de la perturbación del lobo marino", señalaron los investigadores en el artículo especializado publicado en la revista Current Biology.
Según el documento, el número de ejemplares de Colobanthus quitensis ha aumentado un 154% luego de tener indicadores muy bajos de reproducción. Lo mismo sucede con la Deschampsia antarctica, especie que ha presentado un incremento del 28% en la década comprendida entre 2009-2018.
A pesar de que las plantas deben enfrentarse a condiciones de alta hostilidad, cada vez son más grandes y abundantes en diversos lugares y crecen a gran velocidad en zonas de altura en las que no deberían estar presentes por el frío.
Y es que el crecimiento de la temperatura en el continente es un problema que inquieta a los expertos ya que en el periodo de 1960 y 2011 esta región tuvo un promedio de 0.02 grados por año y, actualmente, el indicador es de 0,25 grados.
Esto traerá como consecuencia la posible llegada de especies invasoras que se verán atraídas por las nuevas condiciones ambientales del territorio antártico y que le agregarán aún más desequilibrio al frágil ecosistema.
Y ese resultado es la punta de iceberg (literalmente) ya que, tal como lo manifiestan los investigadores, el hecho de que las flores crezcan de esa manera en la Antártida no vaticina buenos pronósticos para el resto del mundo.
“Nos sorprendió la velocidad de la aceleración detectada aquí, porque confiábamos en registrar un aumento de estas plantas entre nuestras encuestas, pero no podíamos plantear la hipótesis de un evento de tal magnitud (...) Nuestro trabajo proporciona la primera evidencia de los impactos acelerados del calentamiento climático en la Antártida”, aseguró Nicoletta Canone, autora principal del artículo de investigación.
Según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el 48% de las especies de todo el mundo podrían verse en peligro de extinción por cuenta del cambio climático, posible cifra que puede afectar para siempre el destino del mundo y de la civilización humana.