La propuesta de la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, sobre producir las vacunas contra el Covid-19 en la capital del país generó controversia, ya que si bien se debería retomar la producción de vacunas en Colombia, el proceso podría tardar varios años, y la pandemia actual no da espera.
Resulta que la alcaldesa afirmó durante una rueda de prensa con motivo del aniversario del primer caso de coronavirus en Colombia, que adelanta gestiones con cuatro países para la producción de vacunas contra el Covid-19 en la ciudad. "Le hemos propuesto a cuatro países y a cuatro farmacéuticas que instalen sus líneas de producción de vacunas contra el Covid-19 en Bogotá", indicó López.
Las propuestas se hicieron al Gobierno británico y la empresa AstraZeneca; al Gobierno ruso para la producción de la Sputnik V, al Gobierno chino para la producción de Sinovac y al Gobierno estadounidense para la producción de la vacuna de Johnson & Johnson.
Según detalló la mandataria local, esos cuatro países están produciendo un tipo de tecnología de vacunas contra el Covid-19 que se puede desarrollar en Colombia y en Bogotá. Por ello, y gracias a la decisión del presidente Iván Duque de retomar la capacidad de producir vacunas en el país, busca llegar a un acuerdo con alguno de estos países (o con los cuatro) y sus compañías, para empezar a producir vacunas en la capital colombiana.
La idea de la alcaldesa fue cuestionada en algunos sectores de la opinión pública, según argumentaron, generar la capacidad de producir vacunas es un proceso de varios años, por lo que es una iniciativa interesante pero que difícilmente puede ser adoptada para la pandemia de Covid-19.
Moisés Wasserman, investigador científico, exrector de la Universidad Nacional y profesor, se mostró a favor de producir vacunas en el país, pero señaló que en esta pandemia dicha meta no es posible de alcanzar por los tiempos que impone la emergencia sanitaria.
"No solo estoy a favor de producir vacunas sino que las produje y conozco algunas complejidades. Espero que construyamos capacidad para hacerlo pero no será para esta pandemia. A menos que estemos pensando en extender la vacunación un par de años más", expresó.
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En el mismo sentido, la concejal de la Unión Patriótica, Ana Teresa Bernal, respaldó la idea de implementar líneas de producción de vacunas en Bogotá, pero afirmó que es un proceso demorado, por lo que además le pidió que reitere la solicitud al Gobierno Nacional para que Bogotá pueda comprar sus vacunas directamente.
"Acertada decisión alcaldesa Claudia López. Convertir a Bogotá en productora de vacunas es un buen camino, pero un camino muy lento. Le pido que solicite autorización al Gob Nacional para compra directa de vacunas, la vida está en juego".
Y por los lados del periodismo también se rechazó la idea de la alcaldesa, Eccehomo Cetina y Catalina Suárez, calificaron de "populista" dicha iniciativa, puesto que puede ilusionar a muchos ciudadanos, pero realmente estaría lejos de materializarse.
¡Qué politiquería tan descarada la de la burgomaestre Claudia López! No se pudo con la pandemia en la capital y sale con esta ocurrencia engaña idiotas", dijo Cetina.
Mientras que Suárez afirmó: "¿Alcaldesa Claudia López esto será igual que el hospital de Corferias o que la inversión en “investigación“ del covid? Puro titular taquillero mientras con la Alcaldesa “anticorrupción “ se pierden los recursos...".
Es importante mencionar que, el presidente Iván Duque había anunciando previamente que, junto al Ministerio de Salud, se pretender convocar al sector privado farmacéutico y al sector público para desarrollar una capacidad instalada que permita al país producir vacunas, a propósito de la pandemia.
"Colombia tiene una muy buena capacidad de industria farmacéutica, pero para producir vacunas no es solamente tener capacidad instalada para producir medicamentos. Son capacidades instaladas muy distintas que ciertamente queremos fortalecer", explicó en el programa Prevención y Acción del pasado viernes.
Sin embargo, advirtió que el desarrollo de dicha capacidad puede tomar incluso años. Por lo cual, es una medida planteada a mediano plazo, sí pensando en la pandemia actual, pero enfocada a lo que pueda ocurrir en un futuro con otros virus en el país y en el mundo.
En Latinoamérica solo Brasil, Argentina y México producen vacunas contra el Covid-19, Pfizer y AstraZeneca aceptaron implementar sus líneas de producción de vacunas en esos países desde finales de 2020.