El hijo del expresidente Juan Manuel Santos, Martín Santos, envió una dura respuesta a la senadora Paloma Valencia por la crítica que realizó al proceso de paz con las Farc.
En medio del debate para ascensos del Ejército Nacional en el Senado, la senadora Valencia del Centro Democrático tomó la palabra para decir que era necesario fortalecer el Ejército para combatir a los grupos armados que, según ella, han crecido en número de hombres.
“El gobierno anterior nos prometió que con el Acuerdo de La Habana vendría la paz para los colombianos, sin embargo eso no sucedió, sucedió todo lo contrario, a pesar de que insisten en negarlo”, afirmó la senadora Paloma Valencia en su intervención.
La senadora también entregó cifras del número de hombres que se han vinculado a los grupos armados, sin citar la fuente de las cifras que entregó. “Se desmovilizaron 7.000 hombres de las Farc, pero el ELN que tenía entonces 1.500 hombres aumentó en 1.000 hombres adicionales, el Clan del Golfo que tenía 2.250 hombres aumentó en 1.040 hombres”, aseguró la senadora Valencia.
Fue esa afirmación la que generó al respuesta de Martín Santos, hijo del presidente que logró el Acuerdo de Paz con las Farc, quien desmintió la cifra de los excombatientes en reincorporación de las extintas Farc entregada por la senadora Valencia.
Para hacerlo, Santos citó un trino de la Consejería Presidencial para la Estabilización, en el que se afirma que hay 13.185 excombatientes acreditados ante la Consejería. En el trino se cita una declaración del Consejero Presidencial para la Estabilización y el Posconflicto, Emilio Archila. Incluso la Agencia Nacional para la Reincorporación y la Estabilización asegura en su informe de mayo que hay 13.510 personas acreditadas ante la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
Santos escribió : “Miente descaradamente con número de desmovilizados FARC y el propio gobierno la desmiente. Mezcla peras con manzanas para confundir. Más que Paloma, víbora”.
Las otras cifras que emitió la senadora en el debate tampoco son precisas. Según un informe de la Presidencia de la República y el Ministerio de Defensa entregado el 7 de febrero de 2019, en Colombia había, para la fecha, un total de 10.000 personas alzadas en armas, de las cuales cerca de 4.000 pertenecían al Eln, 3.000 a las disidencias de las Farc y 1.600 al Clan del Golfo. Human Right Watch señala que para mayo de 2019 las autoridades colombianas tenían registro de unos 2.300 hombres adscritos a las disidencias del grupo guerrillero.
La senadora expresó sus cifras para decir que “en términos netos, los hombres en armas antes del Acuerdo y después del Acuerdo, solo se redujeron en 1.000, por lo tanto es deber del Estado fortalecer las fuerzas armadas, porque es la única manera de controlar el crecimiento inusitado de todas esas estructura criminales”.
“Pero le sorprende a uno, a los ciudadanos, que en cambio no se haga nada para fortalecer el Ejército, todo lo contrario, pareciera que hubiera un intento permanente de deslegitimarlo, destruirlo, llevarlo a lo menos, entonces uno se pregunta cómo puede estar sucediendo en un país donde es claro el vínculo del narcotráfico con el asesinato de líderes sociales, con el asesinato de desmovilizados, con la toma de nuevos escenarios de violencia a lo largo y ancho del territorio con una campaña para desacreditar a las fuerzas armadas”, puntualizó la senadora.