Las declaraciones del senador y precandidato presidencial Gustavo Petro sobre la efectividad de las vacunas contra la variante Delta del Covid-19 encendieron la polémica en Colombia. De hecho, algunas personas han solicitado a Twitter que suspenda su cuenta o elimine los trinos que desataron la controversia.
En primer lugar, es clave mencionar qué Petro afirmó que las vacunas no sirven para enfrentar la variante delta, según unas supuestas primeras investigaciones. Además, dijo que el virus no es solo un problema biológico sino que tiene un origen en el sistema económico y su tratamiento pasa también por las relaciones de poder y la estructura social y política de la humanidad. Opinó que esa variación apareció porque se dejó a los pobres sin vacuna por auspiciar un negocio.
Lejos de retractarse, Petro citó a Anthony Fauci, un experto en enfermedades infecciosas cercano al gobierno de los Estados Unidos, para sostener su argumento. El senador adjuntó un fragmento de una entrevista que le realizaron a Fauci sobre la determinación de volver a implementar el uso de tapabocas en ese país.
El experto explicó que las personas vacunadas o no podían infectarse igualmente con el virus Delta, así como transmitirlo; sin embargo, no dijo que las vacunas no sirvieran para hacerle frente a esta variante.
Además, es fundamental señalar que, según un estudio publicado por The New York Times y realizado por Pfizer-BioNTech en mayo de este año, dos dosis de esa vacuna tenían una efectividad del 88 % en la protección contra la enfermedad sintomática de Delta. En junio, un estudio realizado en Escocia concluyó que la vacuna tenía un 79 % de efectividad contra la variante. El sábado, un equipo de investigadores de Canadá calculó que su efectividad era del 87 %.
De igual forma, expertos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), como Heriberto García Escorza, director del Instituto de Salud Pública de Chile, y Jairo Méndez-Rico, asesor de Enfermedades Virales, han respondido a Efe que "hasta el momento las vacunas que han sido licenciadas son eficientes contra todas las variantes".
Por tales motivos, cientos de personas le han pedido a las directivas de Twitter que suspendan la cuenta o eliminen los trinos en los que Petro dijo que las vacunas no sirven.
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Teniendo en cuenta el reglamento de Twitter, desde la llegada de la pandemia rige la "Política relativa a la información engañosa sobre la COVID-19", una serie de pautas que establecen los lineamientos para la publicación de contenido que tenga que ver con el coronavirus.
La red social detalla que aunque la comprensión científica del virus aún está en desarrollo, han observado el surgimiento de teorías conspirativas persistentes, retóricas alarmistas sin fundamento en investigaciones o informes creíbles, y una amplia variedad de rumores no demostrados que, si no se enmarcan en el contexto adecuado, pueden impedir que la gente tome decisiones informadas con respecto a su salud, y ponen en riesgo a las personas, las familias y las comunidades.
Para que el contenido relacionado con la Covid-19 sea etiquetado o eliminado conforme a esta política, debe:
- promover afirmaciones dadas por hecho, expresadas en términos definitivos;
- ser manifiestamente falso o engañoso, según fuentes autorizadas ampliamente disponibles; y
- tener muchas probabilidades de afectar la seguridad pública o provocar daños graves.
Twitter estableció que eliminaría las publicaciones con información falsa o engañosa sobre:
- la transmisión del virus (como las afirmaciones falsas sobre la propagación asintomática) o el modo en que este se transmite en interiores;
- la susceptibilidad al virus, por ejemplo, afirmaciones de que grupos o personas específicos son más o menos propensos a infectarse o desarrollar síntomas adversos debido a su nacionalidad o religión;
- los síntomas comúnmente asociados con el virus, por ejemplo, instrucciones engañosas sobre cómo autodiagnosticarse;
- la pandemia o las vacunas contra el Covid-19, en la que se invoca una conspiración deliberada de fuerzas malignas o poderosas.
En ese sentido, la cuenta o los trinos de Petro sí corren peligro, no obstante, es la red social la que se encarga de analizar si realmente lo publicado puede afectar la salud pública.
Además, es de mencionar que el apartado "Debate público sobre el avance de la ciencia y la investigación de la COVID-19", señala que no será sancionada la discusión sobre la investigación relacionada con el virus, como la eficacia de los tratamientos y las medidas de mitigación, siempre que las afirmaciones no tergiversen los resultados de los estudios.
Uno de los casos de suspensión por contenido engañoso más sonados a nivel mundial ocurrió en agosto de 2020, cuando el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, publicó un video afirmando que los niños eran "casi inmunes" al virus.
Por ese mensaje, la red social suspendió una cuenta de la campaña de Trump hasta que se retirara el tuit con el video, ya que suponía "una violación de las normas de Twitter de desinformación sobre Covid-19".
