Para el gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, el impulso de la cultura, y el llevar la institucionalidad a las regiones ha sido una prioridad. A dos años de Gobierno del Cambio, el ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes Juan David Correa dialogó con Kienyke.com sobre los avances que desde la cartera se han alcanzado en esta materia, iniciando desde un cambio de perspectiva, con la mirada en las regiones y combatiendo el “arribismo” y “clasismo”, que a su forma de ver a relegado a los territorios en administraciones anteriores.
“Ese es el reto de este ministerio, empezar a trabajar en que se necesita un cambio cultural en este país. Un cambio de mentalidad, un cambio de formas, de relaciones con esos otros que no han sido incluidos en el relato nacional”, manifestó el Ministro Juan David Correa quien ocupó el cargo en agosto de 2023 en reemplazo de la artista Patricia Ariza, de quien Correa destaca su gestión al frente de la cartera y el cambio de su denominación a Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes.
“La idea de Patricia Ariza es muy importante porque aunque al principio se la consideró una idea demagógica por ciertos sectores, lo que nos puso fue a hablar precisamente sobre ese país que no hemos reconocido ¿Cuántas culturas hay en este país?¿Cuántos pueblos indígenas diferentes?¿cuántos pueblos negros, raizales palenqueros, afros?”, refirió Correa.
A paso seguido, el ministro explicó las afectaciones que ha generado esa mirada “elitista” sobre el desarrollo de las diversas formas culturales en el país, y como a su vez ha incidido en otras problemáticas como la segregación y el racismo que ha dejado atrás el apoyo instituciones a las comunidades afro e indígenas más vulnerables de Colombia.
Vea la entrevista completa con el ministro de las Culturas Juan David Correa
“Es innegable que las decisiones sobre esos territorios obedecieron a ideas culturales que tienen que ver con el racismo, con la racialización, con el clasismo, que tiene que ver con considerar que hay culturas superiores a otras y evidentemente eso produjo unos dramas sociales en este país muy fuertes y muy duros”, pasando a señalar que una cultura “blanca”, del “dinero fácil” y derivada del narcotráfico y la corrupción ha dificultado el reconocimiento de la diversidad cultural en el país, a la par de afectar los valores en la sociedad colombiana.
“Colombia tiene una cultura del arribismo que vino en parte, en los últimos 50 años, por la inmersión y la incursión del narcotráfico en nuestra vida. No quiere decir que sea únicamente ese el factor. Desde que somos república de alguna manera las élites blancas de ciudades como Popayán y Bogotá se impusieron sobre otras (...) Hoy vemos con gran dolor como dentro de las grandes círculos sociales se tolera, se convive y se acepta que aunque se sepa que los dineros provienen de actividades ilícitas como la corrupción, como el narcotráfico, como el robo, como el asalto a la buena fe de los otros (...) no nos importa y miramos para otro lado. Eso tiene que cambiar en esta sociedad y para eso también está el ministerio de las culturas”, agregó Correa.
