Este jueves 14 de marzo el exdiputado del Atlántico, Nicolás Petro Burgos, se presentó ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes en donde se refirió al proceso que se adelanta contra él y el hoy presidente Gustavo Petro por el ingreso de dineros, de dudosa procedencia, a la campaña presidencial de 2022. Tras ello, el primogénito del jefe de Estado entregó algunas declaraciones e insistió en presiones por parte de la Fiscalía General de la Nación.
“Acabo de entregar por escrito ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes los verdaderos hechos en lo que se refiere a la campaña presidencial de mi padre y quienes lo rodearon. Esta es mi única verdad”, manifestó inicialmente Petro Burgos, antes de insistir en acciones por parte del ente acusador que lo condujeron a declarar, en primer término, contra su padre.
“Yo fui presionado para declarar en contra de mi padre, tal y como se evidencia en el interrogatorio, ilegalmente filtrado, en el que continuamente me preguntaban por él sin tener competencia para ello. Quienes rodearon mi detención arbitraria sembraron cizaña para ponerme en contra de mi propio padre”, agregó, asegurando que las indagaciones habrían se habrían tornado más como una persecución política que como una investigación judicial.
Adicional a ello, aseguró que próximamente tanto él como su pareja, Laura Ojeda, entregarán mayores detalles de los “ultrajes, abusos y arbitrariedades”, de los que fueron objeto durante su captura.
Por lo pronto en la Comisión de Acusación también se escuchará la versión de Ricardo Roa, quien fungió como gerente de la campaña presidencial de Gustavo Petro, y quien aclarará si los recursos, provenientes de cuestionados personajes, ingresaron o no al proyecto político.
La tesis que ha presentado Nicolás Petro es que los recursos que le fueron entregados a él fueron destinados a gastos personales. Una versión que ha sido acompañada por su exesposa Day Vásquez y quien prendió en un primer momento el ventilador por los dineros.