El Senado aprobó en segundo debate el proyecto que establece la reducción de la jornada laboral de 48 horas semanales a 40 en los próximos tres años. La discusión despertó un debate sobre los derechos laborales en el país.
El senador del Centro Democrático Honorio Miguel Enriquez Pinedo, quien es el ponente de la iniciativa, señaló que Colombia es uno de los países con las jornadas laborales más largas de Latinoamérica y recordó que en Estados Unidos la jornada es de 40 horas.
“Este proyecto busca incentivar a los trabajadores en la producción emocional que al final se traslada a la productividad de las empresas. Este proyecto ordena que la jornada laboral se reduzca de 48 a 40 horas semanales, que sea de manera gradual, 45 horas el primero año, 42 el segundo y 40 horas en el tercer año, sin perjuicio de que los empleadores que deseen acogerse a la jornada de 40 horas laborales desde el primer año pueden hacerlo de común acuerdo con los trabajadores”, explicó el senador Enriquez Pinedo.
El ponente del proyecto también aclaró que la disminución de las horas laborales no reducirá el salario de los trabajadores. También explicó que la intención del proyecto es que los trabajadores tengan tiempo para acompañar a los hijos en sus estudios o actividades, así como que dispongan de tiempo para invertir en descanso o estudios personales.
“Se trata de un gana porque favorece tanto a los empresarios para que tengan mayor productividad, como a los trabajadores que están más motivados en esas empresas y habrá menos fatiga, menos accidentes laborales y menos enfermedades”, sostuvo Enriquez.
La mayoría de los senadores, incluso de la bancada de la oposición, apoyaron la iniciativa afirmando que votarían positivo a la aprobación del proyecto. Sin embargo, señalaron que aunque plantea un beneficio, podría conllevar a situaciones que vulneren aún más los derechos laborales de los trabajadores.
La senadora Aída Avella señaló que el proyecto, al cuál votó sí, va a ser un saludo a la bandera porque la mayoría de los trabajadores tienen contratos de tercerización con jornadas incluso de hasta 12 horas o 24 horas diarias, por lo que la única forma de avanzar es prohibir la tercerización.
La preocupación de los senadores es que este proyecto incentive la contratación por horas que precariza el trabajo y los derechos laborales, e incluso los contratos, porque podría motivar el uso de contratos de prestación de servicios que no cuentan con las mismas prestaciones sociales e impiden el acceso a créditos como vivienda.
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En ese sentido, senadores como Richard Aguilar, Alexander López, Jorge Eliécer Guevara y otros hicieron la invitación al Senado para que se haga, el próximo año, una reforma laboral completa que elimine la tercerización y los contratos de prestación de servicios para poder garantizar los derechos laborales a los trabajadores.
