Las urnas cerraron el domingo en Venezuela en las elecciones parlamentarias abanderadas por el presidente Nicolás Maduro y rechazadas por la mayoría de la oposición, que ha decidido boicotearlas.
Se espera que las elecciones, disputadas por alrededor de 14.000 candidatos, le den a Maduro el control de la Asamblea Nacional de 227 escaños del país.
Después de que el presidente votara, habló con los medios y describió la actual Asamblea Nacional como "desastrosa".
"Hoy nace una nueva Asamblea Nacional", dijo Maduro tras criticar la saliente, que ganó la oposición en diciembre de 2015.
Dijo que el actual parlamento, que finaliza su mandato el 5 de enero, "trajo la plaga de sanciones", en referencia a las medidas de presión impuestas por Estados Unidos, y por tanto trajo a Venezuela "crueldad, dolor y sufrimiento".
Mientras tanto, el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, calificó las elecciones como un "fraude".
“El fraude se ha consumado y el rechazo mayoritario del pueblo de Venezuela ha sido evidente. A pesar de la censura y la hegemonía comunicacional, la verdad no se puede ocultar”, dijo Guaidó en un mensaje a la nación tras el cierre de las urnas.
La Organización de Estados Americanos (OEA) se negó a enviar observadores a las elecciones del domingo y el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, calificó el proceso de votación como un "fraude y una farsa".
“El fraude electoral de Venezuela ya se cometió. Los resultados anunciados por el régimen ilegítimo de Maduro no reflejarán la voluntad del pueblo venezolano. Lo que está sucediendo hoy es un fraude y una farsa, no una elección”, dijo Pompeo en Twitter.
Jorge Arreaza, Ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, respondió
“¡Un zombi ha hablado! Aunque según su jefe, hubo fraude en las elecciones estadounidenses. Secretario Pompeo, tome la verdad con calma y resignación: en Venezuela, su fracaso es absoluto. Esperamos que pronto la Diplomacia regrese al Departamento de Estado ya la Casa Blanca”, dijo en Twitter.
Luego de que la oposición decidiera no postularse en 2018 por considerar fraudulentas las elecciones, Guaidó fue proclamado presidente interino del país, y más de 50 países lo han reconocido como líder de Venezuela.
La oposición dijo que, hasta el mediodía del domingo, la participación electoral fue muy baja ya que los centros de votación estaban notablemente vacíos. El gobierno dijo que fue un día exitoso.
El movimiento de oposición de Guaidó anunció un referéndum después de las elecciones para preguntar a los venezolanos si quieren terminar con el gobierno de Maduro y celebrar nuevas elecciones presidenciales.
