En Santander la protección de la fauna está en peligro. En menos de tres días la Corporación Autónoma Regional de Santander (CAS) ha encontrado tres cóndores muertos en la zona del páramo del Almorzadero. El tercero de ellos prende las alarmas, puesto que la especie está en vía de extinción.
El lunes 31 de mayo la entidad confirmó la muerte de dos cóndores y, 24 horas después encontraron el cuerpo de otro. Este último se trataba de un cóndor juvenil que fue encontrado en el sector Mortiño, en el municipio de Cerrito.
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“El cóndor que fue hallado tenía problemas graves de salud y por eso fue trasladado hacia la oficina principal de la Corporación”, comentó Alexcevith Acosta, director de la CAS. Sin embargo, cuando recibía atención médica murió por la intoxicación. “Realmente esta es una situación que preocupa a toda la población”, agregó.
Las autoridades están investigando la posible muerte por envenenamiento pues, al lado del cóndor encontraron restos de una carroña que pudo haber sido la causante de su muerte.
Estas sospechas habían iniciado con el caso de los dos primeros cóndores. Incluso, la comunidad del páramo El Almorzadero inició una brigada de búsqueda de la carroña envenenada que podría estar en la zona. El objetivo era evitar que más cóndores se vieran afectados.
La CAS indicó que continuarán con los recorridos en campo. “Aún se está identificando cuál es la procedencia de las intoxicaciones”, explicó Acosta. También hizo un llamado a la comunidad que evite cualquier acción que pueda perjudicar la fauna del país, “sin lugar a dudas disponer de una carroña es una acción humana”, añadió.
Con respecto a los dos cóndores encontrados el domingo, estos fueron llevados a la clínica Medicina Veterinaria Forense de Colombia Animal Defense en Medellín. Allí se están realizando “todos los análisis pertinentes para determinar el motivo y causas de la muerte” indicó la autoridad.
Situación actual de los cóndores
Es importante recordar que, a pesar de que Santander es el departamento con mayor número de cóndores en Colombia, el Primer Censo Nacional de Cóndor Andino en Colombia envió una alerta para la conservación de la especie pues está en peligro de extinción.
Aparte de que los ejemplares son reducidos, las tasas reproductivas del animal también lo son. Los cóndores ponen un huevo cada 2 o 3 años y son una especie monógama, es decir, tienen una sola pareja de por vida.
La preservación de los cóndores resulta importante, puesto que aportan beneficios como: la aceleración de la descomposición de la carroña, reducen la probabilidad de transmisión de enfermedades generadas por los patógenos que albergan los animales en desintegración y disminuyen la presencia de especies que podrían esparcirlas.
Los riesgos de la especie tienen que ver con el envenenamiento de carroñas – como se sospecha en este caso – el choque con líneas de energía, la disminución de sitios seguros para la alimentación y anidación, y la competencia por alimentos y hábitat con especies introducidas, como los perros ferales.
