El deporte es un mundo incomprendido por aquellos que lo miran desde afuera, por esas personas que ven un partido de fútbol como una actividad familiar del fin de semana o la excusa para reunirse a ejercitarse mientras se pasa un buen rato. Esa percepción se queda corta para aquellos que dedican su vida a perseguir un sueño.
Jorge Lizcano, mejor conocido como 'Moneda', hace parte de este segundo grupo de ciudadanos que armaron su vida alrededor de un sueño deportivo: ver a su equipo campeón en todo lugar y en cada instancia posible.
Lo curioso del caso de Jorge no es su sueño, es la forma en cómo desea conseguirlo. Lizcano no es futbolista, pero por muchos años estuvo cada fin de semana en la cancha, desde las tribunas, alentando a Millonarios, su equipo del alma.
Lizcano hace parte de un grupo de la sociedad conocido como los Barristas, que se dedican a acompañar a su equipo de fútbol de ciudad en ciudad y de partido a partido. No obstante, esta actividad generalmente está acompañada de comportamientos vinculados a la violencia y la ilegalidad.
El Moneda, apodo que se ganó mientras era líder de la barra Comandos Azules, no niega estos comportamientos, es más, parece aceptarlos con orgullo pero sin ganas de repetirlos. “Yo salía de un partido y robábamos al de Santa Fe, al de Nacional, los agredimos y eso”, comentó.
En sus historias, Lizcano habla de terribles hechos de violencia que marcaron su pasado en el fútbol colombiano, todos relacionados con la actividad del barrismo. Por ejemplo, uno de los relatos que él admite le daba más felicidad, era cuando, después de un partido, lograba ganar un combate junto con los ‘Comandos’.
Estos ‘combates’, como El Moneda los denomina, eran peleas de cientos de hinchas que, al final de un partido, se encontraban a las afueras del estadio para resolver violentamente malentendidos que nunca quedan del todo claros.
Piensan que el que es fanático roba, es violento, el que piensa que de pronto, por hacer cosas malas, está haciendo cosas buenas.
La nueva etapa de Jorge “El Moneda Lizcano” en el barrismo
La historia de este icónico personaje del Fútbol profesional Colombiano, aunque inició con el pie izquierdo, ha tomado, según él, un nuevo rumbo. Ahora, El Moneda piensa que “Ser hincha es diferente a ser fanático y ser fanático es diferente a ser Barra. Muchos están mezclando la ideología del barra … Para Jorge Moneda el barra es ese que cuida el hincha de la tribuna oriental, de occidental, no lo agrede, no lo asusta, no lo roba”.
En esta nueva etapa de su vida, El Moneda está un poco alejado del grupo que lo vio crecer. “Ya mi tiempo pasó, ya tiene que conocer a otros líderes, a otros referentes; yo ya dejé mi huella”. Lizcano aseguró que su nuevo reto es convencer a los jóvenes que se debe ser hincha de un equipo y no de una barra.
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“Siga dándole cuchillos al resto de locos, déjese atrapar de la tomba, la Fiscalía y se va de cana. Yo no voy a hacer parte de eso”, agregó Lizcano refiriéndose a los comentarios de ‘amigable’ y ‘tibio’ que recibe de las personas que actualmente lideran los Comandos Azules.
En la entrevista a KienyKe.com, Moneda aseguró que su relación con los actuales directivos de los Comandos Azules es mala, pues ellos están “en otra vuelta”. Con esto, Lizcano se refería a ‘el código’ que intenta transmitir a todas las barras populares del país. Esta iniciativa es un sistema silencioso que traspasa hinchadas y tribunas, basándose en el respeto por la vida y el espectáculo del fútbol.
Con este nuevo pensamiento, 'Moneda' recordó alegremente el último título obtenido por el club. “Fue la noche más linda del mundo para más de nueve millones de hinchas de Millonarios. Ese día lloramos, sufrimos y después reímos por esta alegría tan inmensa”, comentó refiriéndose el día que Millonarios sumó la estrella número 16 a su uniforme.
Lizcano sigue amando a su equipo Millonarios, no obstante, asegura que ahora vive un fútbol en paz, acompañado de su familia y amigos, enfocado en el espectáculo deportivo y no en el odio hacia los otros equipos.
'Moneda', intentando implementar 'el código', emprendió una nueva aventura que lo alejará un poco de las canchas, pues espera dentro de poco tiempo ocupar un lugar en el Concejo de Bogotá, desde dónde podrá, según el, seguir repartiendo un mensaje de paz.
