Julián Román regresó a las pantallas por todo lo alto de la mano de ‘Del otro lado del jardín’, la película basada en la novela homónima de Carlos Framb y que recientemente estrenó en Max. Aquí él interpreta al autor, que lanzó esta conmovedora historia hace más de 15 años.
Una vez más el actor tiene la oportunidad de demostrar el talento que tiene, interpretando a un personaje que se encuentra en una posición que seguramente ningún ser humano quisiera experimentar, para quienes no conocen mucho sobre el texto de Framb, esta es la historia de un hombre que se enfrenta a un juicio por haber matado a su madre, un acto de amor, pues su progenitora se enfrentaba a enfermedades crónicas.
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Julián Román se une a un elenco conformado por diversas estrellas Juana Acosta, Vicky Hernández, Luis Fernando Hoyos, Christian Tappan, Yuri Vargas, entre otras. KienyKe.com lo entrevistó para conocer más sobre este proyecto que demuestra el buen trabajo cinematográfico que se hace en Colombia.
KienyKe: ¿Qué material tuviste presente para prepararte en este papel?
Julián Román: Creo que el trabajo previo fue muy importante, los ensayos con Dani (Posada, el director) con el elenco, conocernos y, sobre todo, tener clara la línea de qué queríamos contar, cómo la queríamos contar, para que no nos fuéramos como cada uno por su lado, yo creo que eso fue muy importante y ese trabajo del guion, que de verdad generaron un guion sólido, redondo, es un guion que no deja cositas sueltas sin desarrollar, todo se desarrolla a la perfección y lo digo porque a veces suena un poco pretencioso hablar tan bien de las cosas que en las que uno participa, pero realmente este guion tiene esta solidez y esa potencia que hace que nuestro trabajo, evidentemente, sea mucho más fácil porque como actor, a veces cuando los guiones no son tan sólidos, empieza uno a especular, “esto sería, esto…”, no, esto estaba, así estaba diseñado, más los ensayos, fue el material perfecto para poder rodar la película.
Vea aquí la entrevista completa con Julián Román:
KyK: ¿Qué tan conmovido te sentiste a la hora de desarrollar el personaje?
JR: Sí y yo y siempre agradezco que pase eso, porque cuando un personaje logra incomodarlo a uno, cuestionar, es porque realmente hay algo interesante en él y evidentemente este personaje desde el principio me generó una cantidad de preguntas sobre cómo estoy llevando yo mi relación con el amor, con mi amor y con el amor con los demás, y eso creo que es la ganancia, que llevaré por siempre en mi corazón con esta película.
KyK: ¿Tu opinión frente a la eutanasia cambió al participar en esta película?
JR: Creo que esta película, sobre todo, y como quedó, cómo se cosecha, en ningún momento pretende decirle a la gente qué posición tiene que tener, y lo que más me gusta de esta película, la primera vez que la vi, es que me deja con más preguntas y yo creo que ese es el objetivo del arte, teatro, cine y televisión. Yo creo que el objetivo es dejar más preguntas, sobre todo un poco lo que hablamos acá, en una sociedad tan religiosa, en un país que decimos que es laico, pero se pone la misa en la televisión abierta, entonces uno dice: ‘¿si somos laicos o no somos laicos? ¿cómo funciona?’, entonces eso hace que la conversación sea muy difícil, porque cuando tú vas a tener una conversación y alguien te pone a Dios por delante, ya se acabó la discusión, cómo compites contra un dios, no hay discusión, entonces yo creo que sí hay que abrir los espacios y hay que empezar a perderle el miedo, o no perderle el miedo, explorar el miedo, que yo creo que eso hace que las conversaciones se vuelvan más profundas y dejar un poco esta cosa de ‘no, de eso no se habla’, ¿por qué? Porque no, yo creo que eso no debería existir en ninguna sociedad.