La reconocida actriz de 'La Ley del Corazón ', Mabel Moreno, se fue de vacaciones con su mamá y sus dos hermanas. Estaban juntas en un paseo de playa y de repente pasó algo que por poco se convierte en tragedia. "Nos fuimos de donde estaba la gente, como buscando una playa más lejana y se nos quedó el carrito de golf en la arena. Mientras buscábamos ayuda yo me metí en la playa", contó Moreno en entrevista con La Red.
El meterse a una playa lejana, poco concurrida le pudo costar muy caro a Mabel Moreno: “Había muchos sargazos y mucha alga, no se podía ver el fondo. Yo me metí sin pisar ni nada y de vuelta saliendo cuando pongo el pie piso una raya y no sé cómo decirlo, es como una picadura pero es casi como una puñalada porque entra por un lado y sale por el otro. Ella abre la cola y después la saca”.
Ante lo ocurrido, Mabel comenzó a gritar del dolor, el veneno de la raya comenzó a hacer efecto en el cuerpo de la actriz. "Salgo yo con el pie lleno de sangre, una de mis hermanas me hace un torniquete, estábamos muy lejos porque no había nadie. Mi hermana es una heroína porque eso no lo hace nadie, sacándome el veneno con la boca, escupiendo la sangre, toda una película”, recordó la actriz.
En medio de la nada, fue su madre quien logró ir por ayuda, pues la vida de Mabel Moreno estaba en peligro. “Mi mamá se consiguió diez muchachos que venían de una obra, entre todos sacan el carrito, me alzan y actuaron super rápido, me llevaron a la clínica”.
Fue un trayecto de una hora para llegar a la clínica lo que tuvo que vivir Mabel Moreno y sus familiares, donde los médicos le aseguraron que estos accidentes pueden llevar a que la zona afectada se gangrene y se debe amputar toda la pierna.
“Ese dolor es como si te metieran aceite espeso caliente en las venas y eso comeiza a subir por todos lados. El torniquete no dejó que subiera de cierto lugar y a mí lo que me pasó es que el antibiótico no hizo efecto y se me infectó”, recordó Mabel cuando se encontraba en el hospital.
La herida fue tan severa que no quería desinflamar y fue cuando el equipo médico hizo un hallazgo: “Luego nos dimos cuenta de que había quedado una parte del animal, una espinita adentro y cuando hay un objeto extraño en el cuerpo, el pie se inflamó”.
Aunque su pierna se salvó, la actriz tuvo que suspender actividades por casi tres meses, pero hoy más que nunca se siente agradecida con la vida por darle una nueva oportunidad. “Cuánto valoro hoy ponerme unos tacones, hacer pilates, poder bailar, poder pararme y hacer las cosas que puedo hacer. Un mal paso o un pequeño accidente puede cambiarte la vida”, puntualizó la actriz de 39 años.