Este 17 y 18 de julio el presidente Gustavo Petro participará en la tercera Cumbre de la Unión Europea y América Latina y el Caribe (UE-CELAC), que se realiza en la ciudad de Bruselas, capital de Bélgica. Durante este marco, el mandatario colombiano tiene en agenda varias intervenciones y reuniones de alto nivel, en las que se juega pasos importantes en sus ambiciones ambientales y de paz.
De acuerdo con lo que se tiene previsto, serán precisamente las energías limpias, la transición energética, la paz total, así como la lucha contra la pobreza y el nuevo enfoque de lucha contra las drogas, temas importantes en las intervenciones del presidente Gustavo Petro ante los presidentes de Europa. Este era un escenario que llevaba cerca de una década sin realizarse y que es vital para que países de ambos bloques puedan intercambiar preocupaciones y empezar a construir soluciones de cara al futuro.
Lo cierto es que esta edición de la Cumbre UE-CELAC es de suma importancia para Colombia, ya que trae consigo dos noticias de gran importancia: la entrega de la presidencia Pro Tempore de la CELAC al país cafetero y la ratificación de Colombia como sede de la cuarta cumbre en 2025, en gran parte debido a la aceptación que han tenido los discursos del presidente Petro en materia ambiental y lucha contra las drogas.
La agenda del presidente Gustavo Petro en este marco empieza muy temprano el 17 de julio en la sede principal de la Cumbre, donde el mandatario será recibido por Ursula Von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Luego el presidente asistirá a la primera sesión y a la toma de la foto oficial.
Se prevé una intervención suya de 45 minutos en la Cumbre de los Pueblos, en el Auditorio Nelson Mandela de la Universidad Libre de Bruselas, en la que además estará presente la comunidad colombiana residente en Bélgica. También hablará en la segunda sesión plenaria, el foro de mandatarios progresistas y el evento “Enfrentando el cambio climático: hacia una transición justa y sostenible”.
La preocupación de Colombia respecto al “Pacto Verde”
Lo cierto es que esta III Cumbre representa mucho más allá que un encuentro de gobiernos, ya que tras una década de ausencia de diálogo de alto nivel, la UE-CELAC representa una mirada de Europa hacia Latinoamérica y los países del Caribe. En gran parte por sus intereses económicos, lo cual sugiere una oportunidad de empoderamiento de la relación entre ambos bloques.
En ese contexto, cobra suma importancia el liderazgo que ha venido adquiriendo el presidente Gustavo Petro en temas como la transición energética, al alinearse dentro de los objetivos verdes de Europa. De hecho, de acuerdo con el embajador de Colombia en Bélgica, Jorge Rojas, al menos 13 presidentes europeos han buscado reuniones privadas con el mandatario colombiano en su paso por Bélgica.
El mensaje es poderoso: todo parece indicar que a algunos países del viejo continente no parece molestarles la propuesta del presidente Petro de cambiar deuda externa por acción climática. Una realidad que podría ser beneficiosa para ambos bloques por ejemplo en materia de hidrógeno verde, para el cual ya varias ciudades europeas vienen adecuando sus puertos para poder importarlo en grandes cantidades, mientras que para Colombia significa una potencial oportunidad comercial.
Sumado a ello, aunque es un tema “irritante” entre los países de Latinoamérica y Europa, se espera también abordar las complicaciones que pueden estar surgiendo en este lado del mundo por el llamado “Pacto Verde europeo”. Mismo que ha generado que grandes cantidades de producto agrícola de Colombia, en especial pasifloras, sean detenidos en los puertos europeos por no cumplir con estrictos lineamientos de trazabilidad y derechos humanos.
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Esto es especialmente complicado de cara a las relaciones comerciales de ambos bloques y aunque se sabe que Europa no espera ceder con el tema, un triunfo para Latinoamérica y el Caribe sería poder dejar sobre la mesa sus preocupaciones. Más exigencias arbitrarias sugieren aumentar costos de producción y no permiten a los productores colombianos tener tiempo de reacción, generando pérdidas millonarias en los puertos aún cuando a la transición del Pacto Verde le queda cerca de un año.
En ese sentido, el presidente Gustavo Petro espera poner sobre la mesa el tema de las responsabilidades compartidas en materias clave dentro de ese Pacto Verde, como la descarbonización de la economía y la trazabilidad de los productos agrícolas en materia de deforestación. La idea es hablar fuerte para dejar por sentado que la responsabilidad no es exclusiva de Latinoamérica y el Caribe.
Finalmente, como un tema nada menor, el mandatario colombiano espera que una de las conclusiones de la Cumbre UE-CELAC sea el apoyo a la paz total en Colombia, así como la implementación de los Acuerdos, lo que “impactaría positivamente el impulso al Fondo Europeo para la Paz”, según un comunicado de la presidencia de la República.