En la madrugada de este martes, un ataque con explosivos sacudió el corregimiento de El Plateado, en el municipio de Argelia, Cauca, al sur de Colombia. Según los primeros reportes, un vehículo cargado con explosivos detonó, dejando un saldo de varias personas heridas y causando importantes daños materiales en las viviendas cercanas al lugar de la explosión.
Aunque aún no se ha confirmado el número exacto de heridos, fuentes oficiales han informado que varias personas fueron trasladadas a centros asistenciales para recibir atención médica. Las viviendas cercanas a la zona del ataque han sufrido daños estructurales significativos, obligando a varias familias a evacuar la zona ante el riesgo de nuevos incidentes.
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El ataque ocurrió luego de la muerte de alias ‘Andrés Patiño o El Mocho’, líder del Bloque Occidental Jacobo Arenas de las Farc. El vehículo cargado con explosivos fue detonado al cierre de las festividades de los Carnavales de Negros y Blancos, o Fiestas Culturales, en la localidad, cuando decenas de personas se encontraban disfrutando de un concierto.
La lamentable noticia se da en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en el departamento del Cauca. La Defensoría del Pueblo había emitido una alerta temprana recientemente, advirtiendo sobre los riesgos para las comunidades en siete departamentos del sur del país. La alerta hace referencia a la creciente confrontación armada entre las disidencias de las Farc, particularmente aquellas bajo el mando de alias 'Calarcá Córdoba' y 'Iván Mordisco'. Este enfrentamiento, que se intensificó con la escisión del Estado Mayor Central (EMC), ha generado un aumento en las violaciones de derechos humanos y el desplazamiento forzado en las regiones afectadas.
El documento de la Defensoría señala que hay un riesgo grave para 45 municipios, en particular en departamentos como Cauca, Putumayo, Caquetá, Huila, Amazonas, Meta y Guaviare. Las autoridades expresan que en algunas zonas ya se evidencian confrontaciones bélicas entre estos grupos armados ilegales, lo que requiere acciones urgentes de prevención para evitar mayores daños a la población civil.
Este ataque también pone de manifiesto la fragilidad de la situación en Cauca, donde desde 2023, el Gobierno y el EMC habían iniciado un proceso de negociación que terminó con la escisión de este grupo armado debido a la beligerancia de algunos de sus frentes, principalmente en esta región. Sin embargo, la violencia no ha cesado, y la comunidad sigue expuesta a los efectos de este conflicto.