El volcán Puracé, ubicado a unos 26 kilómetros de Popayán, en el departamento del Cauca, ha experimentado un incremento en su actividad sísmica desde la noche del 19 de enero, según un informe del Servicio Geológico Colombiano (SGC) emitido en la madrugada de hoy. A partir de las 11:06 p.m. de ese día, se detectó una señal sísmica tipo "tremor", la cual está asociada a un aumento de presión interna y movimiento de fluidos en el interior del volcán. Este fenómeno provocó la emisión de ceniza hacia la atmósfera, generando una dispersión de material volcánico hacia el suroccidente del cráter.
Las poblaciones cercanas, como Popayán, Puracé y Coconuco, han reportado la caída de ceniza y la percepción de olores a azufre, lo que ha generado preocupación entre los habitantes de estas zonas. Sin embargo, el SGC aclaró que, aunque la actividad sísmica ha aumentado y se ha producido la emisión de ceniza, los niveles de actividad volcánica han vuelto a sus valores previos, y las demás técnicas de monitoreo no han mostrado variaciones significativas en su comportamiento.
A pesar de la aparente calma, el volcán Puracé mantiene su estado de alerta amarilla, lo que implica que el sistema volcánico sigue mostrando actividad potencialmente peligrosa, aunque de alcance limitado. En este nivel de alerta, se podrían presentar fenómenos como emisiones esporádicas de ceniza (con erupciones menores), pequeñas explosiones, incandescencias, ruidos, anomalías térmicas de baja energía y la precipitación de azufre en las zonas cercanas.
El SGC también indicó que los fenómenos de dispersión de ceniza dependen de la dirección del viento, lo que podría afectar distintas áreas cercanas al volcán. De igual manera, se podrían generar sismos sentidos y otros efectos que se mantendrán bajo observación continua.
El Puracé, un volcán activo de tipo estratovolcán, se encuentra en el suroeste de Colombia, específicamente en las coordenadas 2° 19' 01" N y 76° 23' 53" W. Con su imponente presencia en el paisaje del Cauca, el volcán es un fenómeno natural de gran interés para los geólogos y un factor de riesgo para las comunidades cercanas.
El SGC seguirá monitoreando la actividad volcánica y alertará a la población sobre cualquier cambio significativo en el comportamiento del Puracé. Las autoridades recomiendan mantenerse informados y acatar las recomendaciones para evitar situaciones de riesgo.