Por medio de un boletín de prensa, el Servicio Geológico Colombiano confirmó que se presentó un aumento en la energía de la señal sísmica continúa el martes, 21 de enero, con respecto al último reporte que la entidad había emitido.
Además, confirmaron que siguen las desgasificaciones a través de fumarolas del volcán Puracé, y de los dos nuevos focos generados durante la emisión de ceniza ocurrida el pasado 20 de enero en el volcán Curiquinga.
Indicaron también que los sensores instalados en la parte alta del volcán Puracé siguen registrando niveles importantes de emisión de dióxido de azufre (SO2) a la atmósfera, lo que deriva en fuertes olores a azufre.
De acuerdo a lo anterior, los habitantes de los municipios de Paletará, Puracé, y Popayán en el Cauca han reportado las afectaciones por las reacciones químicas que se han presentado por la confluencia de dióxido de azufre que sale a la atmósfera.
Por otro lado, la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) ha realizado en días anteriores sobrevuelos a la cadena de volcanes en Los Coconucos, además de registrar imágenes de la actividad en los volcanes de Puracé, Piocollo y Curiquinga.
Estas tomas permitieron captar la formación de un sistema de grietas y cavidades de aproximadamente 200 metros de longitud y anchos que varían en un ancho hasta de 30 metros.
De paso, también se observaron acumulaciones de ceniza en la parte alta y las laderas de los volcanes Puracé, Piocollo, Curiquinga, Calambás y Paletará, así como cráteres de impacto de proyectiles balísticos emitidos durante la actividad volcánica ocurrida el 20 de enero.
En el comunicado se puede leer que el Servicio Geológico Colombiano confirma que la zona se encuentra en alerta amarilla, destacando que se pueden presentar fenómenos de emisiones esporádicas de ceniza volcánica.