Es un hecho que el próximo miércoles 28 de abril de 2021 se realizará un paro nacional convocado para protestar contra la reforma tributaria que propone el Gobierno Nacional y ha sido rechazada por ciudadanos, sindicatos, centrales obreras e incluso varios partidos políticos.
Esta masiva convocatoria se realiza en medio del tercer pico de la pandemia de Covid-19 que tiene en jaque a los sistemas de salud de varias zonas del país. Por eso, algunos mandatarios locales y departamentales han solicitado aplazar el paro nacional o buscar otras formas de protesta que no impliquen aglomeraciones.
De acuerdo con algunos alcaldes y gobernadores, salir a las calles a protestar es un gran riesgo y podría generarse una gran ola de contagios de Covid-19 empeorando la situación de salud en Colombia.
¿Qué dicen los funcionarios?
Por una parte, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, señaló que aunque no vulnerará el derecho a la movilización, si pide a la ciudadanía que el paro nacional se aplace y calificó la situación actual como un "incendio pandémico".
"No voy a vulnerar el derecho a la movilización y la protesta y se tendrán todas las garantías. Sin embargo es anómalo realizarla en este incendio pandémico, por ello les propongo realizarlo en otra fecha, menos "caliente" para lo cual se declararía Día Cívico", escribió en su cuenta de Twitter el alcalde Jorge Iván Ospina.
Además, el alcalde de Cali le propuso al Gobierno Nacional retirar el proyecto y "construir un gran ACUERDO NACIONAL que de respuesta a una Pandemia no superada (Con virus mutados más contagiosos) y sus funestas consecuencias socio-económicas"
El gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, se unió a la propuesta de aplazar la fecha del paro nacional convocado para este miércoles 28 de abril.
"De manera respetuosa y siendo reiterativos en el derecho a la protesta, lo que se está pidiendo es que se aplace la protesta, no es que se cancele, sino que se aplace por el riesgo que hay", dijo el mandatario departamental.
La alcaldesa de la capital del país, Claudia López, también ha sido enfática en rechazar una manifestación masiva en esta época. Advirtió que la capital del país está "entre al vida y la muerte" por cuenta del tercer pico de la pandemia y calificó el paro nacional como un "atentado contra la vida".
Esta postura le generó a la mandataria de los bogotanos un gran número de críticas en su contra, pues algunos ciudadanos consideran que da un doble mensaje al apoyar la conglomeración de personas en un evento deportivo como la Vuelta a Colombia, o que se permita que los buses de transporte público vayan a tope, mientras condena la protesta social en tiempos de pandemia.
Por otra parte, el alcalde de Medellín marcó una diferencia al evitar trinos en rechazo al paro nacional contra la reforma tributaria. Lo que sí dijo, es que la Alcaldía está buscando más camas UCI para enfrentar los contagios adicionales que pueden derivarse de la protesta.
"En Medellín estamos buscando al menos 30 UCI adicionales para llegar a 1100 y así enfrentar los contagios adicionales que podría generar una marcha masiva. Recomiendo prudencia, las nuevas variantes del virus han creado un efecto retador para nuestro sistema de salud", escribió Daniel Quintero en su cuenta de Twitter.
