Para nadie es un secreto que el Chocó ha sido históricamente uno de los departamentos más ignorados del país, por lo menos en cuanto a atención estatal se refiere. Algo que al final se traduce en menor calidad de vida para sus habitantes, poco desarrollo estructural y social, así como constituye el caldo de cultivo ideal para todo tipo de economías ilegales y corrupción.
Irónicamente, al tiempo que es el departamento más pobre por debajo de la Guajira, el Chocó es también uno de los territorios con mayor riqueza natural en todo el país, consolidando factores como ser el único territorio nacional que colinda con dos océanos (el Pacífico y el Atlántico), al tiempo que es bañado por el Río Atrato (el tercero más importante del país). Una tierra hecha para ser próspera, con las materias primas a la vuelta de la esquina y las venas fluviales para conectarse con el mundo.
Sin embargo, este territorio también tiene una insignia poco envidiable: ser el departamento con mayor número de gobernadores desde el comienzo del siglo, con un lamentable muro de la fama en el que la mayoría de sus protagonistas han terminado con procesos judiciales por estar involucrados en algún episodio de corrupción.
Desde las elecciones de 1997, en un escenario ideal, cualquier departamento en Colombia debería llevar su cuenta en seis gobernadores o gobernadoras, cumpliendo debidamente sus períodos constitucionales. Chocó, desde esa época, suma 17. A continuación, la triste historia en capítulos de una de las indignidades políticas más bochornosas del país.
Elecciones regionales 1997
Desde 1997 y hasta 2007 las elecciones regionales en Colombia otorgaban el título al triunfador por tres años. Para entonces, quedó elegido Luis Gilberto Murillo, actual embajador de Colombia en Washington, quien terminó fuera de su cargo en 1999 tras un nuevo escrutinio decretado por el Consejo de Estado que le dio el triunfo a otro de los candidatos.
Sumado a ello, Murillo fue condenado a seis meses de prisión en 1997 por el delito de peculado por apropiación diferente, luego de que como director de Codechocó (en 1994), invirtiera cinco millones de pesos que según el presupuesto eran para saneamiento minero, en el arreglo del techo de una escuela. Sin embargo, ese delito o por lo menos la forma en la que estaba concebido desapareció con la reforma al Código Penal del 2000.
Así las cosas, en enero de 1999, con 114 votos por encima de Murillo, el ingeniero Juan Betzabé Hinestroza Cossio se posesionó como gobernador del Chocó, terminando su periodo en 2001. Años después, Betzabé fue investigado por “presuntas irregularidades al destinar más de 100 millones de pesos en viáticos para relaciones públicas”, según reseñó el diario el tiempo en 2002.
Elecciones Chocó 2000
En esta contienda electoral quedó electo como gobernador William Halaby Córdoba, quien terminó su periodo en 2003. En aquella ocasión, según registros de la época, logró el triunfo con una apuesta que intentaba alejarse del populismo, un carácter firme y promesas de buena administración sobre la riqueza natural del departamento.
Sin embargo, como siempre, todo ese discurso quedó en palabras. El señor Halaby fue detenido en 2010 por agentes del CTI, luego de que la Corte Suprema de Justicia lo hallara culpable de celebración indebida de contratos. El hecho por el que se le condenó: una contratación directa para la construcción de un acueducto en el municipio de Atrato, en la que se descubrió poca o nula experiencia del contratista elegido a dedo (sin licitación pública).
Elecciones regionales 2003
En 2004 se posesionó como gobernador Julio Ibarguen Mosquera, quien de igual manera cumplió su periodo hasta 2007. Y la historia se repitió, ya que en 2022 fue condenado en dos ocasiones, la primera por 8 años y 3 meses por el delito de peculado por apropiación en favor de terceros.
Según determinó la Corte Suprema de Justicia, Ibarguen giró 35 millones de pesos a su entonces Secretario de Hacienda con el fin de cubrir los gastos de un supuesto debate electoral. Dinero que luego intentó ser legalizado con facturas falsas y que se demostró habría sido apropiado por el funcionario de Hacienda.
A los pocos meses, en julio de 2022, fue condenado a cinco años y nueve meses de prisión por interés indebido en la celebración de contratos, por una contratación de 1998 relacionada con una empresa de licores del departamento, en la que habría intercedido a favor de un tercero de quien habría obtenido una coima.
Elecciones del Chocó 2007
En esta ocasión resultó electo el gobernador Patrocinio Sánchez Montes, quien inauguró los periodos de cuatro años. Sin embargo, no logró terminar su periodo a poco de terminarlo, pues fue suspendido de su cargo luego de ser hallado culpable de peculado culposo por irregularidades en una contratación de salud mientras se desempeñaba como alcalde de Quibdó. Al parecer, hizo que se pagara dos veces una deuda de su administración.
En su lugar, el 11 de mayo de 2009 llegó Pascual Agudelo, mandatario que generó polémica por considerarse una imposición antioqueña en el Chocó. Rápidamente, par de meses después fue designado por el gobierno Antonio Gómez Rodríguez como gobernador encargado. Dos gobernadores en un abrir y cerrar de ojos…o más bien tres, ya que el último designado por el Gobierno Santos fue Malcom Alí Córdoba en marzo de 2011.
Este último caso es quizá la cereza del pastel de todo este asunto, pues con apenas 9 meses en el cargo, Córdoba es acusado de presuntos delitos de prevaricato por acción y peculado por apropiación en la Corte Suprema de Justicia, por la supuesta autorización del pago del salario de 25 docentes (que no correspondían) por una suma superior a los 1.200 millones de pesos.
Elecciones regionales 2011
Finalmente llegó el año de la esperanza con las elecciones de 2011, donde volvió a quedar electo como gobernador Luis Gilberto Murillo tras lanzarse como fórmula de Cambio Radical y se esperaba esta vez sí lograra sacar al Chocó de la crisis institucional en la que se encontraba. No fue así, ya que su vieja condena volvió a pasarle factura.
Una vez ganó, la oposición no demoró en demandar su elección y aunque gozó con el visto bueno del CNE y la Procuraduría, quienes respaldaron que estaba habilitado, al final el Consejo de Estado falló en su contra en julio de 2012 suspendiéndolo de forma indefinida hasta que se resolviera su situación jurídica, dando continuidad a una decisión similar tomada por el Tribunal Administrativo del Chocó.
En su reemplazo, mientras se definía la terna, el entonces presidente Juan Manuel Santos designó a Óscar Gamboa Zúñiga, quien fungía como director del Programa Presidencial Afrocolombiano de la Presidencia. Luego de eso, en noviembre de 2012 quedó oficialmente como gobernador encargado Hugo Arley Tobar Otero.
Elecciones atípicas del Chocó 2013
Como si no fuese suficiente, a vísperas de las elecciones, en octubre de 2013, Tobar fue retirado de su cargo sorpresivamente y reemplazado por Julieta Gómez, asesora del MinInterior, en un momento en el que el departamento atravesaba un paro armado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Chocó estaba en el limbo político y Santos se vio obligado a convocar elecciones atípicas en diciembre. En estas resultó electo Efrén Palacios, candidato de una coalición formada por los partidos Liberal, Conservador y Cambio Radical.
Aunque Palacios terminó su periodo en 2015, ¡ojo!, porque en octubre de 2020 los exgobernadores Hugo Arley Tobar, Efrén Palacios Serna, y Jhoany Carlos Palacio Mosquera fueron acusados de peculado por apropiación y de contratación sin requisitos legales, por cuenta de una licitación que buscaba llevar gas natural a distintos municipios del Chocó y que terminó en un millonario desfalco con miles de millones del erario público en manos de terceros.
De ese poco tiempo con Palacios al mando, también se desprenden acusaciones de la Fiscalía en 2016 por presuntamente haber pagado deudas de campaña con recursos de unos contratos de compra de medicamentos para los más pobres del Chocó. Su nombre sigue sonando hasta hoy, ya que a finales de 2022 le formularon cargos por irregularidades en un contrato para adecuar 250 estanques piscícolas en el que mágicamente subieron los precios de las cosas y el monto del anticipo.
Gobernadores 2016 - 2019
En 2016 llegó la nueva cara de la Gobernación, Jhoany Carlos Palacios, elegido con las banderas del acuerdo de las fuerzas políticas más fuertes del Chocó. Movimiento que recibió el nombre de “Acuerdo político por la dignidad y autonomía con autoridades propias”. De todo ello, solo el nombre, pues pocas personas en este país tienen tantas investigaciones disciplinarias como Palacios.
Lo más curioso de todo es que hoy en día funge como Representante a la Cámara por el Chocó, dignidad que ostenta gracias al Partido Liberal. Además del caso del gas, Palacios es investigado por irregularidades en distintos contratos, en la construcción del Hospital Lascario Barbosa Avendaño de Acandí, la primera etapa de la Universidad Tecnológica de Istmina, entre otros casos que lo hacen uno de los congresistas más investigados del país.
Elecciones regionales de 2019
Ya en la última etapa, en las elecciones de 2019 terminó elegido Ariel Palacios Calderón, de la mano con los partidos Liberal, Verde y Conservador. Desde entonces, el Chocó ha tenido tres gobernadores, luego de que Palacios terminara en un lío jurídico por cuenta de una contratación en medio de la pandemia que involucró cerca de 2 mil millones de pesos (aunque la Procuraduría ya lo absolvió por ello).
El contrato por el que se le investiga y que lo mantiene aún en medida de aseguramiento, tiene que ver con la compra de elementos de bioseguridad por un valor de 220 millones de pesos, que lo dejó imputado por la presunta celebración de contratos sin requisitos de ley y prevaricato por omisión. Según la Fiscalía, dicho contrato no habría demostrado motivación, necesidad, cantidad, tipo y destinación de los artículos, así como habría presentado falsedad en la etapa precontractual y no procuró por el mejor contratista.
En su reemplazo, llegó como gobernador Jefferson Mena Sánchez el 24 de abril de 2020 y duró hasta julio de ese año, cuando Palacios regresó para hacer frente a la escasez de UCIs en Chocó. Sin embargo, en marzo de 2022, por el proceso antes mencionado, llegó a la gobernación William Darwin Hallaby mientras el gobierno decidía.
Gobernadora actual del Chocó
Luego de esta larga y nada destacable lista, finalmente en enero de 2023, en vísperas de nuevas elecciones, fue nombrada como gobernadora encargada Farlin Perea Rentería, abogada presentada en la terna por el Partido Liberal que hasta ahora fungía como gerente étnica en la Alcaldía de Medellín.
Aunque es una mujer capacitada tanto en el plano académico como profesional, con una larga vida política en la que de hecho registra el Chocó, probablemente un año pueda ser poco para levantar a un departamento con este historial de corrupción, limbo político y olvido estatal. Todavía peor cuando las maquinarias de siempre, la política que parece haber condenado a este territorio a no triunfar, ya está calentando motores para las regionales que determinarán el nuevo gobernador 2024-2027.
