El Gobierno colombiano, a través de su embajada en Washington, oficializó su solicitud a Estados Unidos de que "considere la autorización de un beneficio migratorio temporal" para los colombianos que se encuentren en ese país.
"Me gustaría solicitar formalmente al Gobierno de Estados Unidos que considere autorizar un beneficio migratorio temporal para colombianos presentes en el país bajo el programa humanitario de Salida Forzosa Diferida (DED, en inglés)", se lee en una carta enviada por el embajador colombiano en EE.UU., Luis Gilberto Murillo, al Gobierno estadounidense.
Este programa, al que ya se han acogido países como Venezuela o Liberia, permite a migrantes de países con conflictos o desastres naturales permanecer en EE.UU., por lo que el embajador Murillo aludió en la misiva a que "por más de 60 años, cientos de miles de colombianos se han visto obligados a dejar su país por el conflicto" y con ello llegaron a países como EE.UU. "de forma vulnerable y desprotegida".
"La migración debería ser una opción o una decisión voluntaria, no una decisión de vida o muerte", escribió Murillo en la carta dirigida al Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, y al Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, donde también habló de los esfuerzos actuales del Gobierno de Gustavo Petro por conseguir la "paz total".
"Como quedó dicho, nuestro objetivo es que nuestra gente sea capaz de volver a Colombia de una manera digna si así lo eligen o que ajusten su estatus migratorio en EE.UU. si tienen las posibilidades legales de hacerlo", se lee.
Por ello, Colombia confía que el presidente Joe Biden pueda dar "ayudas para esta migración temporal" y seguir cooperando para solucionar la migración en el hemisferio occidental "bajo un ángulo humanitario".
El pasado 3 de octubre, durante la visita de Blinken a Colombia, Petro le pidió un Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) para los colombianos que están en Estados Unidos.
"Creo que un TPS para colombianos es necesario", dijo durante una conferencia de prensa Petro frente al funcionario de Estados Unidos, donde se calcula que hay 2,6 millones de colombianos y donde este año ha aumentado sustancialmente las detenciones de migrantes del país andino en la frontera