En el marco de la COP26, el Ministerio de Ambiente volvió a radicar en el Congreso de la República la ratificación del Acuerdo de Escazú. Esta iniciativa ha adquirido gran importancia en América Latina porque busca garantizar el acceso a la información ambiental, la participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales y el acceso a la justicia en casos relacionados con este mismo asunto. Sin embargo, el Gobierno Nacional no lo radicó con mensaje de urgencia, por lo que su aprobación vuelve a quedar en veremos.
"En ningún momento se le ha hecho conejo, el presidente Iván Duque fue quien presentó el acuerdo en julio del 2020 pero el año pasado por la agenda legislativa no se pudo consolidar. El compromiso fue presentarlo antes del 31 de octubre y el día viernes a última hora por los tiempos se radicó", dijo el ministro de ambiente Carlos Correa desde Glasglow.
Es de señalar que, este proyecto contaba con mensaje de urgencia en la pasada legislatura y aún así se hundió por falta de trámite en las Comisiones segundas conjuntas. No obstante, el jefe de la cartera aseguró que el Gobierno confía que la ratificación sea aprobada en esta legislatura, a la que le restan menos de dos meses.
El anuncio generó molestia en los sectores de oposición, ya que el Gobierno ha defendido el acuerdo y en diversas oportunidades ha expresado su compromiso con el mismo, pero no ha movido sus fichas en el Congreso para priorizar las discusiones de esta iniciativa.
"Duque cada día es más sorprendente, radicó acuerdo de Escazú a última hora y sin mensaje de urgencia mientras saca pecho en la #COP26 ¡Mentiroso!", expresó la representante Katherine Miranda, del Partido Alianza Verde.
El acuerdo divide opiniones
Aunque el Gobierno ha dicho que la ratificación de Escazú es un tema prioritario de su agenda en el legislativo, el Centro Democrático le ha dado la espalda a la iniciativa al considerar que dota de poderes a las ONG y obstaculiza el desarrollo de proyectos productivos.
"Lo repito: ratificar el acuerdo de Escazú sería un grave error. No es un tratado de protección medioambiental, solo da un poder desmedido a las oeneges y haría muy difícil el desarrollo de proyectos productivos. Equivocación del Gobierno insistir en él. ¡Congreso debe hundirlo!", sostuvo el precandidato presidencial Rafael Nieto Loaiza.
Por su parte, la oposición ha solicitado en diversas oportunidades que se le de trámite a la ratificación partiendo de que, a su juicio, sería una buena herramienta para proteger a los líderes ambientales de la violencia. Por ejemplo, en 2019 fueron asesinados 69 líderes ambientales en Colombia y el 30% de los líderes asesinados en el mundo murieron en el país.
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¿En qué consiste el Acuerdo de Escazú?
El proyecto impone obligaciones en cuanto a la generación y divulgación de información ambiental, sistemas de información, acceso a la justicia en asuntos ambientales y participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales. Así como la creación y el fortalecimiento de las capacidades y la cooperación.
Los Ministerios que tienen injerencia en la ratificación del acuerdo son: Interior, Relaciones Exteriores, Justicia y del Derecho, Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, Cultura, y de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
Además, ordena que se tomen "medidas apropiadas, efectivas y oportunas para prevenir, investigar y sancionar ataques, amenazas o intimidaciones que los defensores de los derechos humanos en asuntos ambientales puedan sufrir en el ejercicio de los derechos contemplados en el acuerdo".
A la fecha ya lo firmaron 22 países, de los cuales 9 ya lo ratificaron (Antigua y Barbuda, Bolivia, Ecuador, Guyana, Nicaragua, Panamá, San Cristóbal y Nevis, San Vicente y las Granadinas, y Uruguay); y están pendientes de ratificación 13 países (Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Granada, Guatemala, Haití, Jamaica, México, Paraguay, Perú, República Dominicana y Santa Lucía).