El consumo de marihuana en Colombia ha aumentado considerablemente durante los últimos años, según la información entregada por el Observatorio de Drogas en Colombia, al menos el 84,4% ha probado alguna vez este producto y el 52% lo probó en el último año.
Consumo que es fuertemente apoyado por diferentes sectores políticos del país, quienes han visto en el cannabis una oportunidad para fortalecer el comercio colombiano.
El denominado 4:20 surge como un movimiento cultural en Estados Unidos. Según las primeras hipótesis, estudiantes en California se reunían después de sus clases en la estatua de Louis Pasteur. Con el transcurrir de los años, el 4:20 se convierte en el símbolo de una generación que aprovecha este día para protestar contra las medidas restrictivas del consumo de marihuana a nivel internacional.
En Colombia se ha visto un gran número de ciudadanos que apoyan esta ideología, los cuales se reúnen en diferentes puntos del país para consumir este producto.
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Cada vez son más los colombianos que se encuentran interesados en consumir un producto de calidad, por lo cual buscan tener cultivos naturales cuyo producto no sea nocivo para la salud de los consumidores.
Pero los consumidores no solamente buscan que la mata de marihuana tenga buena calidad. Los insumos y elementos necesarios para el consumo deben cumplir con los requerimientos exigidos para que la experiencia sea completa.
Escuche acá el podcast sobre el Día Internacional de la Marihuana:
La industria cannábica en Colombia cuenta con una serie de proyectos que buscan la reglamentación del consumo de la marihuana en el país, además del buen uso de este producto ya sea de manera medicinal o recreativa.
Desde el Concejo de Bogotá se mueven algunas iniciativas para la regulación de este producto. Así fue dado a conocer por el concejal Juan Baena, quien manifestó su rechazo al ver el retraso en la aprobación de la marihuana en Colombia. Según Baena, “mientras en Estados Unidos varios estados aprobaron el uso medicinal y el consumo adulto del cannabis, en Colombia nuestros congresistas se niegan a dar el debate”.
Él cataloga a este producto como “la mata que salva” porque el potencial económico que tiene la marihuana es bastante amplio, por lo que, según él, la regularización de este producto podría ser un activo importante en la reactivación económica del país.
“El cannabis tiene un potencial enorme en términos de reactivación económica. El proyecto que radicamos busca contribuir en importantes aspectos. Que la secretaría de Desarrollo económico implemente acciones que busquen facilitar la bancarización por parte de pymes y MiPymes”, afirma Baena sobre las oportunidades que tiene el cannabis en Colombia.
Algunos consumidores de marihuana en Colombia, consultados por KienyKe.com, manifestaron su apoyo a las diferentes iniciativas que actualmente se tramitan en el Congreso de la República. Ellos indican que tienen muy buenas bases, ya que hay personas y empresas que “tienen proyectos productivos establecidos para el aprovechamiento del cannabis, mucho más allá del consumo recreativo o psicoactivo como muchas personas lo asumirían”.
“Hay una industria que está dispuesta a crecer, a aportar lo necesario para que el marco regulatorio pueda ser mucho más amplio, cómodo y satisfactorio para que estas empresas que hacen parte de la industria del cannabis puedan crecer. Es una industria con mucho potencial”, manifestó la persona consultada.
Asimismo, cuenta que diferentes sectores sociales están interesados en hacer dinámico y didáctico el proceso de consumo de marihuana en el país, con el objetivo de que las autoridades, entes territoriales y gubernamentales, flexibilicen sus ideas y generen una propuesta en la cual los consumidores no se vean afectados.
Cannabis medicinal en Colombia
El cannabis medicinal ha surgido como alternativa a las fuertes dolencias; en realidad, es un producto que ha estado presente durante muchas décadas, pero que en la actualidad ha tomado aún más fuerza. Por esto, sectores políticos y sociales han apoyado fuertemente la idea de que se autorice el consumo de este producto en el país, dejando los estigmas y paradigmas que lo rodean.
Paulo Gómez Hoyos, secretario de Salud de Santa Rosa de Cabal, entendió que por medio del cannabis podía tratar las enfermedades crónicas o terminales que tenían algunas de las personas que día a día trataba en su consultorio.
Fue allí cuando notó que había serias necesidades en materia de manejo del dolor entre personas con enfermedades crónicas o terminales, las cuales podrían ser tratadas a partir del cannabis y los derivados de la planta, por lo que decidió estudiar una maestría en tratamiento del dolor en la Universidad de Salamanca (España) y hacer un diplomado en la Universidad del Rosario sobre los usos terapéuticos del cannabis.
La opinión de Gómez es compartida por Edward Rodríguez, representante a la Cámara del Centro Democrático por Bogotá, quien manifestó en entrevista para KienyKe.com que la industria del cannabis, una vez regulada, puede ser un potencial en el campo del área medicinal. “En ese orden de ideas, lo que nosotros queremos con un proyecto de ley ya radicado es promover y facilitarles a los empresarios del cannabis el desarrollo de esta economía”, añadió.
Sobre el tabú que rodea esta industria, Rodríguez manifestó que “lo que se cree es que se está legalizando la marihuana y en ningún momento se está legalizando, lo que se está haciendo es legalizar un producto ya establecido por la comunidad médica, aplicado o recogido y se está permitiendo que Colombia avance hacia el desarrollo de esta industria”.
Gustavo Bolívar, senador colombiano, también manifestó su interés en trabajar en pro de la legalización del consumo de marihuana recreativa según él, "mucho menos dañina que el alcohol, muy estigmatizada y me gustaría lanzar la campaña “la despenalización de la naturaleza, ya que no encierran ningún peligro”.
Si bien existen diferentes proyectos de ley que buscan la regulación y reglamentación de la marihuana en Colombia, aún existen diferentes vacíos alrededor de este producto. En el caso del porte mínimo de marihuana, los ciudadanos solamente podrán tener una cantidad no superior a los 20 gramos y la marihuana hachís que no exceda de cinco.