Para la nueva edición del Premio Nacional de Periodismo Digital, en el marco del Festival de los Sentidos, se cuenta con jurados de gran perfil y carácter internacional, como lo es Silvia Gómez, directora de Greenpeace Colombia.
Este año la ceremonia del premio organizado por la casa editorial de Contenidos K se llevará a cabo el 2 de diciembre, en esta ocasión Silvia Gómez participa como jurado, evaluando las diversas propuestas sobre periodismo digital desde diferentes categorías.
Vale recordar que Gómez es antropóloga de la Universidad de los Andes y Maestra en Ciencias Holísticas de Schumacher College (Centro Internacional de Estudios Ecológicos para el desarrollo), afiliado a la Universidad de Plymouth, Devon, Inglaterra.
En entrevista con KienyKe.com, la directora de Greenpeace Colombia conversó sobre varios temas de la agenda medio ambiental en la actualidad, evidentemente es imposible no hablar sobre la pandemia.
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Silvia Gómez empezó narrando cómo la crisis ha cambiado la perspectiva y forma en que las personas se informan sobre contenidos ambientalistas.
“La crisis que provocó el Covid-19 sin duda alguna nos puso la vida de arriba pa’ abajo, veníamos en una ruta y en un nivel de crecimiento, de vida organizada, sin mucho cuestionamiento, sin mucho freno, sin mucha reflexión, sin preguntarnos realmente si nuestra forma de vida, nuestra forma de consumo, nuestros hábitos alimenticios, laborales, de relaciones, pues iban por buen camino y yo creo que lo que hizo esta pandemia fue realmente encender todas las alertas para entender que estábamos abusando en muchos sentidos de la palabra”.
“No hay salud en un planeta enfermo, primero, y eso quiere decir que parte del origen de estos virus tienen que ver con pérdida de biodiversidad, con altos índices de contaminación, con desequilibrio planetario, desequilibrio en términos químicos, en términos físicos, incluso en términos emocionales de la humanidad, en la medida en que nos damos cuenta que hay desequilibrios y que finalmente ya no los podemos tapar con un dedito, sino que nos toca aislarnos”.
A continuación, la antropóloga hace un llamado a repensar la manera en que se vive en las ciudades y cómo las personas se relacionan, también menciona la importancia de crear conciencia en cómo se alimentan y compran las personas, según lo expresado, el cambio es imperativo.
Asimismo, Silvia menciona que deben tomarse medidas que deben perpetuarse de inmediato, “por ejemplo, a la disminución de los viajes aéreos, pensábamos que era imposible no viajar, y nos damos cuenta que no es imposible, que es una necesidad, y realmente el planeta no aguanta el nivel de emisiones de gases de efecto invernadero que genera la industria de los aviones, nos damos cuenta que todos los temas de movilidad en las ciudades se restringen, nos damos cuenta que trabajar en casa tiene muchas más ventajas que desventajas y nos damos cuenta que duramos 3 o 4 horas en un trancón, que podemos movilizarnos en bicicleta, que podemos salir menos, que podemos repensar nuestra manera de trabajar, cuando estamos en la casa nos damos cuenta que somos mucho más conscientes de la forma en que nos alimentamos y nos hacemos peguntas por primera vez, ¿de dónde sale mi comida?, ¿quién la produce?, ¿esto es importado?, ¿esto es fresco?, ¿esto está lleno de químicos, ¿esto es orgánico?, ¿es la primera vez que prendo el horno?, cuando pido un domicilio me doy cuenta que viene lleno de plástico y empiezo a sentir yo como ciudadano normal que soy responsable de una cantidad de cosas que suceden en el planeta y que si bien no puedo solucionarlas yo de manera exclusiva o individual, pues si tengo mucha responsabilidad”.
“Yo creo que la vida sí nos cambió profundamente, ahora, nuestra responsabilidad como ciudadanos es exigir a las empresas y a la institucionalidad, a los gobiernos, que no volvamos a la normalidad, que ahora todas las medidas para recuperar la economía no sigan privilegiando unas ciertas industrias que vienen en declive, que vienen cuestionadas pero que supuestamente son las que generan mayor economía”, agregó la directora de Greenpeace.
“Yo lo que creo es que nos toca repensar, repensar nuestra economía, repensar nuestros modelos de desarrollo, repensar la manera en que veníamos viviendo, consumiendo, decidiendo, no solamente para evitar otra crisis, sino yo diría más bien prepararnos para las que vienen, porque esta no va a ser la primera vez, estamos viendo también que vienen crisis sobre crisis, estamos en pleno Covid y hay un revuelto y un descontento entendible a causa de la inequidad, sobreautoridad y nos van pasando muchas cosas que tenemos que relacionar y que vamos a tener que entender también que no podemos ver los fenómenos de una forma independiente, es decir, los temas ambientales tienen que ver con problemas de salud, los temas de salud tienen que ver con salud, los temas económicos tienen que ver con temas políticos y vamos a tener que repensar el desarrollo de una manera mucho más holística y más integral”.
Teniendo en cuenta su rol como jurado de los trabajos recibidos este año por el Premio Nacional de Periodismo Digital, Silvia Gómez también compartió su opinión sobre cuál es el papel que periodismo digital tiene en la divulgación de la agenda medioambiental en la actualidad.
“Es fundamental, yo aplaudo la iniciativa del concurso porque lo que venimos viendo es que la tecnología y la manera en que se viene democratizando la información es muy beneficiosa para que realmente todos podamos acceder a información que antes no podíamos acceder, y justamente lo que Greenpeace y otras organizaciones, buscan también acortar esa distancia entre la población general y los tomadores de decisiones”.
La académica indicó que hubo un tiempo en que las personas no tenían el espacio para presionar o generar un impacto en quienes toman decisiones importantes para la sociedad, pero que en la actualidad los ecosistemas digitales han dado un importante giro a esa situación.
“Lo que estamos viendo es que las tecnologías, las redes sociales, el periodismo digital, acortan esta distancia y permite entonces que la información y que la toma de decisiones sea mucho más democrática y que entonces los tomadores de decisiones estén mucho más expuestos a las consecuencias que tienen sus decisiones, eso es supremamente valioso”.
“El periodismo digital lo que le permite a los jóvenes y a las nuevas generaciones es investigar sobre los temas que les interesa, es poner su atención, su energía, su pasión en las cosas más sencillas y más accesibles que tienen, sin necesitar plataformas grandes, sin tener que ser periodista, sin tanto título, lo que hace es que les permite acceder a eso y nosotros hicimos hace unos años unas encuestas sobre, en un rango de 18 a 28 años, en 125 municipios de Colombia, cuáles eran los temas que más pasión, compromiso y tiempo le dedicaban los jóvenes, el 80% de los jóvenes priorizaron de manera contundente temas ambientales”.
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“Entonces es una era muy interesante porque es una generación que tiene una sensibilidad y que ve realmente que el cambio climático no es lora, que el cambio climático no es una hipótesis, que el cambio climático es real y está relacionado con la manera en que cuidamos o destruimos nuestros bosques, reciclamos o producimos demasiado plástico, cuidamos o contaminamos nuestras cuencas hidrográficas, consumimos más o consumimos menos, entonces sí hay una conciencia muy interesante”.
La directora de Greenpeace Colombia resalta al periodismo digital como una herramienta que permita la apertura de canales digitales, de acceso a la informal, creando un entorno más democrático.
“Yo creo que en la medida de que esas tendencias suceden, abrir ese tipo de espacios genera balance y da mucho aire al acceso de información, al acceso de información de diferentes geografías. Yo estaba revisando los trabajos que tengo que evaluar y es fascinante ver los rincones de Colombia donde vienen los trabajos, los temas tan particulares y tan específicos, que no son tan comunes y que resultan fascinantes porque no hay un script previo, no hay una curaduría previa, sino que la gente puede genuinamente inscribirse y construir el trabajo que consideró era relevante para su comunidad, para su barrio, para su familia y yo creo que eso es un avance inmenso para la democracia”.