La Selección Colombiana de Rugby Femenina avanza cada vez más. El combinado nacional se presentó recientemente al repechaje olímpico con el objetivo de obtener uno de los dos cupos a Tokio 2020, aunque no pudo conseguirlo.
Kienyke.com conversó con Valentina Álvarez, jugadora que actualmente milita en las filas de las Tucanes y estuvo presente en el evento clasificatorio realizado en el principado de Mónaco.
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La jugadora bogotana comenzó su trayectoria en este deporte cuando “un amigo que practicaba rugby me dijo que debería practicarlo. Yo fui y me presenté sin saber nada, pero yo creo que el rugby tiene algo que lo atrapa a uno que uno ni siquiera sabe qué es. En el momento en que uno pisa una cancha y entiende cómo se juega, como que tiene una magia, me atrapó de una”.
Su ingreso a la Selección Colombia fue relativamente reciente, pues de los tres años que lleva ejerciendo este deporte, dos de ellos ha vestido los colores nacionales. Por este motivo, su proceso de adecuación con el resto del grupo fue complicado en un inicio.
“Fue un choque bastante grande porque entrar a una Selección de alto rendimiento implica que tu también tienes que ponerte al nivel. Si eres de otra región diferente a Medellín obviamente te toca esforzarte un montón más para que te vean, para estar al nivel de ellas”, manifestó.
Ahora bien, en cuanto a la repesca olímpica, Valentina Álvarez reveló cómo fue el proceso de preparación para llegar en las mejores condiciones posibles al evento.
“Durante la pandemia nunca paramos de entrenar en casa. Ya después cuando nos pudimos reunir hicimos diferentes concentraciones y estuvimos en un torneo preparatorio que nos sirvió mucho para la cohesión y la unión del equipo. Madrugábamos todas las mañanas un montón, íbamos al gimnasio, luego a cancha, recuperación y así todos los días sin parar”, confesó.
De igual manera, la jugadora de las Tucanes relató cómo fue la experiencia que vivieron en Mónaco, donde se jugaron el cupo para Tokio 2020.
“Fue algo increíble. Toda la gente que estaba a disposición del torneo, compartir el hotel con diferentes países: Tonga, Rusia, Túnez (…) Todo ese intercambio cultural fue una experiencia muy bonita.
En cuanto a los partidos, fue un reto bastante grande porque nunca en la historia del rugby colombiano nos habíamos enfrentado a esos equipos (Madagascar, Francia y Hong Kong), entonces no sabíamos cómo jugaban ellas. El primer partido fue algo difícil para nosotros porque sí o sí teníamos que ganarlo, pero, al no lograrlo, muchas cosas del componente mental nos jugaron la mala pasada”.
A pesar de la derrota, Valentina se mostró agradecida con “la oportunidad de jugar contra unas jugadoras del nivel de Francia, entendiendo que ellas entrenan seis horas al día rugby, dos horas gimnasio de lunes a sábado, viven juntas... Es como ver ese ejemplo y ver cómo nosotros desde Colombia podemos empezar a subir a ese nivel”.
Con respecto a los objetivos de la Selección Colombiana de Rugby Femenina, Álvarez mencionó que, a corto plazo, las Tucanes buscan prepararse “de la mejor manera para el torneo que tenemos con Kenia en Nairobi, que se va a realizar en agosto, pero en modalidad de 15 jugadoras.
A eso le estamos apostando ahorita. Después de haberle ganado dos veces a Brasil en esa modalidad, tenemos una base bastante sólida para el partido contra Kenia”.
Ahora bien, a largo plazo, Valentina señaló que “la idea es hacer un buen ciclo olímpico y poder clasificar de una mejor manera a los Juegos Olímpicos de París en 2024”.
