Un episodio ocurrido la semana pasada en el que unos turistas españoles denunciaron los elevados precios que fueron cobrados por un establecimiento en las playas de Cartagena, generó los comentarios de la gente en las redes sociales, debido a que se cobraban precios exagerados por productos que no son tan complicados de conseguir. Entre los que comentó su opinión sobre el tema estuvo Tulio Gómez.
Adrián Magnoli, periodista argentino, realizó una publicación en su Twitter sobre el tema de los precios elevados en algunos establecimientos de Cartagena, en el que criticó la forma en la que se cobraban los productos. Allí, adjunto unas fotografías en las que se mostraba la cuenta que había llegado, por comidas y bebidas.
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“En Cartagena no existe la factura electrónica ni el Datáfono, la prehistoria y para colmo le agregan un 0 más a todo”, escribió Magnoli, en su cuenta de Twitter sobre la delicada situación que se vive en algunos establecimientos de la ciudad heroíca.
Ante este comentario, Tulio Gómez decidió emitir su opinión a través de Twitter en el que habló fuerte sobre la atención de algunos restaurantes en Cartagena, además de mencionar la forma en la que se trata al turista.
“Roban al turista y lo espantan, cuando ya nadie los visite ya no habrá tiempo de llorar, en algunos negocios de Cartagena no hay cultura de atender bien al turista para que regrese e invite a otros a visitarnos”, escribió Gómez, sobre esta situación que cada vez toma más fuerza y que aún tiene varios inconvenientes en la ciudad amurallada.
Habló lanchero de Barú que habría agredido a mujer por millonaria cuenta
El lanchero que estuvo envuelto en la riña por el cobro de más de dos millones de pesos a unos turistas ecuatorianos por comerse dos mojarras y tomarse cuatro cervezas, rompió el silencio. En diálogo con Noticias Caracol, aseguró que él no comenzó la pelea y entregó una versión diferente a la de la mujer que denunció haber sido agredida.
Su nombre es Daniel Cervantes, trabaja desde hace varios años como lancero en Playa Blanca en la isla de Barú de Cartagena. Si bien estuvo allí presente, asegura que no fue él quien generó el millonario cobro a los turistas.
En cuanto al incidente con la mujer que grababa en su celular, explicó lo ocurrido: “se me pega atrás grabándome y le digo ‘me sigues grabando y te boto el teléfono’; me acerca el teléfono a la cara y lo manoteé. Cuando le manoteé el teléfono el marido me agredió, me tiró dos trompadas y yo me defendí”, dijo Cervantes a Noticias Caracol.