Personas del colectivo LGTBI son detenidas y maltratadas por la policía catarí, pese a las presiones ejercidas sobre el país árabe para que respete los derechos de estas personas, a pocas semanas del Mundial de Qatar 2022.
Así afirmó este lunes Human Rights Watch (HRW) en un comunicado en el que exigió que las autoridades cataríes frenen la violencia contra las personas LGBTI y deroguen las normas y leyes que penalizan sus actividades o incluso su presencia en el país.
La nota explica el caso de varias personas LGBTI cataríes entrevistadas por HRW, quienes afirmaron haber sido sometidas a maltratos en septiembre pasado en Qatar, apenas dos meses antes del evento deportivo más importante del planeta.
HRW documentó seis casos de palizas severas y repetidas, y cinco de acoso sexual bajo custodia policial entre 2019 y 2022, dice la nota, y destaca que efectivos del Departamento de la Seguridad Preventiva, del Ministerio de Interior, detuvieron a personas en lugares públicos por su expresión de género y registraron ilegalmente sus teléfonos.
Para su puesta en libertad, la policía catarí obligaron a las mujeres trans a asistir a sesiones de terapia de conversión en un centro de "apoyo conductual" patrocinado por el Gobierno, añadió.
"Las fuerzas de seguridad están deteniendo y abusando de las personas LGBTI simplemente por lo que son, aparentemente confiadas en que los abusos no se denunciarán ni controlarán", dijo Rasha Younes, investigadora de derechos LGBTI de HRW, según la nota.
HRW recordó que las autoridades cataríes afirmaron en 2020 que darían la bienvenida a las personas LGBTI que desearan asistir al Mundial, y que los aficionados serían libres en poner o enarbolar la bandera del arcoíris durante su presencia en el país árabe.
La ONG subrayó, sin embargo, que el artículo 28 del Código Penal catarí castiga las relaciones extramatrimoniales, incluidas las relaciones entre personas del mismo sexo, con hasta siete años de prisión.
"Las sugerencias de los funcionarios de que Catar haría una excepción a sus leyes y prácticas abusivas para los extranjeros son recordatorios implícitos de que las autoridades cataríes no creen que sus ciudadanos y residentes LGBTI merezcan derechos básicos", dijo HRW.
En ese sentido, la organización apuntó que "el gobierno de Catar debería poner fin de inmediato a este abuso y la FIFA debería presionar para garantizar una reforma a largo plazo que proteja a las personas LGBTI de la discriminación y la violencia".