La Copa América de 1995 trajo consigo una sorpresa que pocos aficionados del fútbol esperarían. La Selección Argentina tuvo que verse las caras con una conjunto de Estados Unidos que llegaba a la edición número 37 del torneo como invitada por segunda vez en la historia del certamen sudamericano.
Aunque apenas desde 1993 se había comenzado a admitir combinados de otras confederaciones, el elenco norteamericano repitió participación de manera consecutiva, al igual que sus vecinos de México.
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Sin embargo, en la primera oportunidad para Estados Unidos, ni la suerte ni los resultados estuvieron de su lado. En aquella Copa América de 1993, los ‘yankees’ no fueron capaces siquiera de evitar quedar ubicados en la última casilla del Grupo A, el cual compartía con Ecuador, Uruguay y Venezuela.
De todas maneras, el equipo dirigido por el entonces entrenador, Mark Stephen Sampson, volvió a aceptar la invitación realizada por la Conmebol para competir en un nuevo torneo sudamericano dos años después.
Así, Sampson y compañía iniciaron un nuevo curso en esta competición teniendo en su misma zona a una de las mejores selecciones del continente: Argentina. El combinado ‘albiceleste’ estaba conformado por múltiples figuras que se destacaban a nivel nacional e internacional tales como Javier Zanetti, Diego Simeone, Abel Balbo, José Antonio Chamot, Gabriel Batistuta, entre otros.
De cualquier forma, el elenco estadounidense llegó a territorio uruguayo con la intención de mejorar lo demostrado en la más reciente Copa América. Transcurrieron las dos primeras jornadas del torneo y el conjunto norteamericano registraba una victoria y una derrota, sumando únicamente tres unidades.
Más allá de esto, aún existía la posibilidad de que Estados Unidos finalizara líder del Grupo C; ‘solo’ debía vencer a Argentina. Por su lado, los ‘gauchos’ llegaron a la última fecha clasificados matemáticamente y, teniendo en cuenta que sus rivales no eran, a priori, una selección de alto riesgo, el técnico Daniel Passarella tomó la decisión de alinear un once titular con múltiples variantes.
Al ver a una ‘albiceleste’ diezmada por la propia determinación de su entrenador, el combinado norteamericano se empezó a frotar las manos, teniendo una oportunidad única para ser el verdugo de los argentinos por primera vez en la historia.
Una vez el juez dio inicio al compromiso en el Estadio Parque Artigas, Estados Unidos solo necesitó de 20 minutos para anotar el primer tanto de la noche con la firma del delantero, Frank Klopas, quien remató un balón en el borde del área hacia el fondo de la red.
Adicionalmente, poco antes del cierre de la primera parte, los ‘yankees’ pusieron el segundo gol en el marcador tras la definición de ‘taquito’ de Alexi Lalas, por en medio de las piernas del guardameta ‘albiceleste’.
En el segundo tiempo, el estratega argentino Pasarella realizó un intento por tomar el dominio del partido, dándole ingreso a Diego Simeone y Ariel Ortega. Sin embargo, el técnico no pudo detener la catástrofe esa noche, pues Eric Wynalda sentenció el encuentro en el 58 de juego para finalizar la goleada 3 por 0.