La pandemia obligó a la sociedad a tener un cambio de chip frente a cómo llevar su vida laboral en medio de la crisis. Tanto las personas honradas como las que van en contra de la ley, que en este caso son los traficantes de drogas, reinventan su lugar y espacio para sobrevivir a esta situación.
Entre el desespero de encontrar una solución para enviar sus productos desde Bogotá hacia otras regiones de Colombia y el mundo, los delincuentes ingeniaron una nueva modalidad sin resultados positivos a su favor.
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De acuerdo con la Policía Nacional, en los últimos meses se incautaron más de 63 mil gramos de estupefacientes en el Aeropuerto Internacional El Dorado. Por medio de encomiendas, los traficantes de drogas han intentado engañar a las autoridades fracasando en su intento.
Lo más curioso para la Fuerza Pública es el ingenio que tienen estas personas para continuar con su labor en medio de la pandemia. En varios operativos encontraron gramos de marihuana y cocaína al interior de maletas, empaques de pañitos húmedos para bebés, juguetes para niños y hasta en las zuelas de los zapatos.
Uno de los casos más llamativos que logró detener la Policía Nacional fue la encomienda de comida que salió desde Bogotá hacia San Andrés.
En una de las cajas encontraron paquetes de maní con 4.310 gramos de marihuana, despertando el asombro de las autoridades y una alerta mayor debido a que los traficantes seguían haciendo de las suyas durante la pandemia.
En otro vuelo hacia ese mismo destino, las autoridades hallaron otros 8.315 gramos de marihuana empacados en tarros de duraznos. Así mismo ocurrió con un vuelo hacia Leticia en el que la Policía aeroportuaria encontró varios paquetes de cocaína dentro de un par de cajas de alimentos.
"Otros elementos muy concurridos por los traficantes son televisores y herramientas para construcción, los cuales son adaptados tratando de evadir los controles de la Policía, especialmente los potentes olfatos de los perros antinarcóticos", señaló la Fuerza Pública.
Así como la pandemia ha sido enemiga de muchos trabajadores formales y legales, también se ha interpuesto en el negocio de los traficantes de drogas que no hayan la manera de cómo lograr su cometido.