Tal como anunciaron los voceros del estudiantado de la Pontificia Universidad Javeriana, este viernes se han venido realizando plantones para protestar en contra del alza de los precios de las matrículas de la institución. En horas de la mañana, los manifestantes bloquearon varios edificios del campus y ahora, después de haber realizado una asamblea, decidieron volver a tomarse la carrera 7ma.
Según se le informó en exclusiva a KienyKe.com, al rededor de 1.500 estudiantes protestaron con pancartas y muestras artísticas en la carrera 7ma con calle 45, lugar donde están ubicadas las instalaciones de esta universidad.
En horas de la tarde, las movilizaciones se concentraron en varios edificios de la institución, tales como el bloque de la administración, el central, el edificio Giraldo y el bloque del Varón. Adicionalmente, los plantones generaron bloqueos en la carrera 7ma y afectaron la movilidad del sector.
Una vocera de la comunidad de estudiantes le informó a KienyKe.com que estarían a la espera de una asamblea estudiantil que se realizaría al rededor de las 4 de la tarde para definir si seguirían en paro indefinido o no y cuáles serían las siguientes acciones por parte del estudiantado.
Al rededor de las 5 de la tarde, los manifestantes decidieron salir a las calles nuevamente y tomar la carrera 7ma, donde se presentan bloqueos y congestiones viales. Tenga en cuenta esta novedad para tomar rutas alternas y evitar transitar por esta vía.
Noticia en desarrollo...
¿Por qué protestan los estudiantes de la Javeriana?
KienyKe.com tuvo acceso exclusivo a un comunicado del estudiantado de La Javeriana, mediante el cual expusieron el pliegue de peticiones dirigido a los directivos de la universidad con respecto al alza de los costos.
"Por medio del presente documento, el estudiantado de la Pontificia Universidad Javeriana seccional Bogotá expresa de forma contundente su inconformidad frente a la decisión arbitraria por parte de los directivos de aumentar de manera desmesurada y exorbitante la matrícula de todos los programas curriculares en un 13,9% para el siguiente semestre", se lee en el documento.
La comunidad estudiantil resaltó que, pese al periodo de austeridad económica que se está afrontando a nivel nacional, los precios asignados no son coherentes con esta coyuntura y podrían desincentivar a los alumnos a continuar con sus estudios, lo que incrementaría los índices de deserción académica y afectaría el prestigio de formación profesional de Colombia.
"Consideramos que este aumento desproporcional es un atentado directo contra la comunidad y sus familias que continúan aún con rezagos producto de la crisis económica que se vivió durante y después de pandemia; a esta situación se le suma el aumento en la tasa de cambio del dólar frente al peso, la tasa de desempleo del total nacional que oscila en una 10,7% según cifras del DANE, una creciente crisis alimentaria y un inminente panorama de recesión económica de proporciones globales para 2023", agregaron los alumnos.
Con base en estas afirmaciones, la comunidad expuso una tabla de precios de los programas académicos en la que se comparó las cifras del 2022 con respecto a los que se asignaron para el 2023. El alza de los costos oscila entre 747 mil pesos, para la carrera de Ciencias de la Información, y casi 4 millones de pesos, para la carrera de Medicina -cuyo precio subió de 26.322.000 pesos a 29.981.000 pesos-.
Adicionalmente, el estudiantado hizo referencia al alza de costos sugerida por el Ministerio de Educación, la cual está basada en el IPC (Índice de Precios al Consumo), el cual ha sido del 0,7%, y en la inflación acumulada en 2022, cuyo índice es del 10,9%.
Así mismo, "es importante remitir las siguientes disposiciones del decreto 110 de 1994 como del Art. 122 de la Ley 30 de 1992, según las cuales todo incremento de esta naturaleza, especialmente si sobrepasa los topes recomendados por el Ministerio de Educación Nacional, debe justificarse de forma clara y concreta de cara al mejoramiento de la calidad educativa".
Por esta razón, los alumnos de la Universidad Javeriana se declararon en paro estudiantil indefinido, hasta que los directivos de la institución escuchen sus peticiones y tomen decisiones al respecto.
Como primera exigencia, se pidió que la medida de incrementar los costos de la matrícula en un 13,9% sea revocada y que se establezca una mesa de diálogo para reevaluar y concertar el aumento.
Adicionalmente, el estudiantado le exigió a la institución entregar un reporte de los gastos y demás movimientos financieros pertinentes a este tema que puedan ser públicos y visibilizados por toda la comunidad.
También se solicitó crear un espacio de diálogo y negociación amplio, proactivo, abierto y participativo entre los miembros de la comunidad estudiantil y la vicerrectoría administrativa, con el fin de que las medidas con respecto al alza de la matrícula se puedan tomar en conjunto de manera "justa y democrática".
"Mejorar el sistema de pagos ofrecidos por la universidad, eso quiere decir dinamizar o ampliar los tiempos de abono para el pago de obligaciones financieras relacionadas al pago de las matriculas académicas", fue la quinta petición.
Por último, le exigieron a los directivos garantizar la permanencia de personas becadas bajo las diferentes modalidades de pago que ofrece la universidad y teniendo en cuenta las condiciones socio-económicas que se presentan en el país.
"Al encontrarnos próximos al cierre del ciclo 3 del 2022, la decisión de entrar en paro se levantará solo si se logra llegar a una concertación que se traduzca en la resolución de los puntos estipulados en el pliego de peticiones. Esto, permitiendo mejorar las condiciones educativas del estudiantado, así como brindar una educación de calidad, digna y accesible para todos. No nos quedaremos callados frente a lo que consideramos transgrede, quebranta y vulnera nuestro derecho a la educación", concluyó el documento.