En una sorprendente y angustiante noticia, un niño de 9 años en Bogotá, identificado como David Ramírez Noy, ha captado la atención de los medios tras escapar de su hogar con la intención de convertirse en YouTuber.
La historia ha conmocionado a la comunidad local y ha suscitado una reflexión sobre la influencia de las redes sociales en los más jóvenes.
David Ramírez Noy, quien residía en la localidad de Kennedy, al sur de Bogotá, dejó a su familia en un estado de desesperación. En la mañana del 25 de agosto, el pequeño huyó de su casa montado en su bicicleta, tras dejar una emotiva carta en la que explicaba su decisión de seguir su sueño de convertirse en creador de contenido digital. En la carta, David expresó que no encontraba el apoyo necesario en su hogar para perseguir su pasión por YouTube.
Las cámaras de seguridad del barrio La Floresta Sur captaron el momento en que David salió de su casa vestido con una pantaloneta, una camisa azul y chancletas.
La preocupación de sus familiares creció a medida que pasaban las horas sin noticias del niño, intensificando la búsqueda en toda la ciudad.
El origen de la decisión de David parece estar relacionado con un incidente reciente. Según su madre, el niño recibió un fuerte regaño por haberse quitado media ceja, un acto que aparentemente desencadenó su decisión de abandonar el hogar.
"Él llegó y se quitó media ceja. Lo regañé muy duro, pero no había justificación para que el niño se fuera. Nunca se había ido, como yo le decía a él, todo a su debido tiempo porque estaba muy chiquito", relató la madre en medio de su angustia.
El caso generó una amplia respuesta por parte de las autoridades y la comunidad. El teniente coronel Norberto Caro, jefe seccional de Protección y Servicios Especiales de la Policía Metropolitana de Bogotá, informó que gracias a la colaboración de la ciudadanía, David fue localizado en la localidad de Fontibón este martes 27 de agosto. El niño fue encontrado en buen estado y está a la espera de reunirse con sus padres en el terminal de Salitre.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) se encargará ahora de evaluar el estado de salud de David y de llevar a cabo el proceso de restablecimiento de derechos. Esta intervención es crucial para asegurar que el niño reciba el apoyo emocional y psicológico necesario tras su experiencia.