El pasado lunes 29 de julio, un hecho trágico y perturbador conmocionó a la localidad de Suba, en Bogotá. Un adolescente de 14 años, identificado por las autoridades, ha sido acusado de asesinar a su hermana de siete años y a su padre, el mayor activo del Ejército Fabián Humberto Bueno Carranza, en un aparente caso de violencia intrafamiliar.
La noticia ha generado una profunda preocupación y cuestionamiento sobre los factores que pueden llevar a una situación tan extrema.
El incidente, que ocurrió alrededor de las 11:30 de la noche en el barrio Bosques de San Jorge, fue reportado a través de la línea de emergencia 123, cuando los vecinos alertaron sobre una riña violenta en la vivienda de la familia.
A su llegada, la patrulla de la Policía Metropolitana de Bogotá encontró dos cuerpos sin vida y a dos personas más, incluyendo a la esposa del mayor y madre de los menores, herida.
De acuerdo con la Fiscalía, la investigación liderada por la Unidad para la Responsabilidad Penal de Adolescentes de la seccional Bogotá revela que el joven utilizó un arma blanca para atacar a sus familiares en repetidas ocasiones.
La gravedad de las lesiones provocó la muerte instantánea de las víctimas en el lugar. La esposa, quien estaba fuera de la casa en ese momento, logró sobrevivir a pesar de resultar herida.
El juez de garantías para adolescentes ha imputado cargos de homicidio agravado al menor, quien ha aceptado su culpabilidad en el doble crimen.
Además, se le ha impuesto una medida de internamiento preventivo en el Centro de Internamiento Preventivo La Acogida (CIPLA) en Bogotá. El adolescente permanecerá en este centro mientras se desarrolla el proceso judicial en su contra.
En las primeras horas tras el crimen, la situación se complicó debido a testimonios contradictorios de la madre y el menor. Ambos se culpaban mutuamente, lo que generó confusión en la investigación inicial. Sin embargo, la declaración del adolescente resultó clave para esclarecer el caso, revelando los detalles macabros del ataque.
Testimonios de vecinos indican que el joven había planeado el asesinato con anticipación. Según un residente de la zona, el adolescente tenía la intención de eliminar a toda su familia, pero su madre sobrevivió al ataque ya que no estaba en casa en ese momento.
La llegada de la madre en medio del crimen fue un factor decisivo que evitó una tragedia aún mayor. Los informes sugieren que el menor atacó a su hermana y a su padre mientras estos se encontraban en la vivienda, y posteriormente intentó eliminar a su madre al llegar.
La comunidad local ha expresado su conmoción y angustia ante el crimen. Los vecinos mencionan que no habían observado señales de conflictos graves dentro de la familia, lo que hace el suceso aún más perturbador. Algunos testimonios afirman que se escucharon gritos de la niña pidiendo ayuda, lo que añade una capa de horror al incidente.