La propia alcaldesa de Bogotá Claudia López se sumó a las cientos de personas que publicaron en redes sociales una foto con bultos de papa al hombro que habrían comprado a los campesinos cundinamarqueses en las salidas vehiculares de la capital colombiana.
La alcaldesa apareció con una ruana, prenda tradicional de los campesinos del altiplano cundiboyacense, un tapabocas amarillo y medio bulto de papa, empacado en bolsa roja plástica, cargado al hombro.
Aunque la mandataria capitalina se habría tomado la foto en medio del ‘Papatón’ en Bogotá, para mostrar e invitar a los habitantes a apoyar la compra directa de productos agrícolas a los campesinos, la fotografía despertó críticas en las redes sociales.
Algunos la criticaron precisamente porque el bulto de papa que cargó al hombro estaba en bolsa plástica y, por esa razón, podría ser de intermediarios y no de cultivadores directos del producto.
Uno de los que atizó el revuelo fue el senador Gustavo Petro, uno de los principales opositores de la alcaldesa Claudia López, quien compartió la fotografía insinuando que la mandataria había comprado a intermediarios y no a campesinos.
“Cuando la papa está lavada y en bolsa plástica, es señal que es papa de intermediarios y no la que vende directamente el campesino. Los intermediarios de la papa están con el actual gobernador de Boyacá”, escribió el líder de la Colombia Humana en su cuenta de Twitter.
Ante la crítica, el ex gobernador de Boyacá y anterior asesor de Claudia López, Carlos Amaya, defendió a la mandataria capitalina y aseguró que algunos campesinos también lavaban la papa para la venta.
“No, senador, no desinforme. Que la papa esté lavada significa que el campesino hoy puede hacerlo porque, entre otras, en los últimos años se adquirieron lavadoras. Que el campo de Boyacá esté lleno de nobleza no significa que no tenga capacidad de producir con excelente calidad”, señaló Amaya.
Sin embargo, el ex gobernador de Boyacá fue interpelado por uno de los principales promotores de la compra de papa a los campesinos, el representante por el mismo departamento e impulsor del #PapaChallenge, Cesar Pachón que no creyó que la papa fuera de campesinos.
“Ex Gobernador, para confiar en su contra argumentación ¿Puede dar la lista de productores pequeños de Boyacá que han hecho ese lavado y procesamiento y que han sido beneficiados? ¿Cuánta papa se vendió? ¿Cuántos productores que no estaban ya inscriptos a los mercados se sumaron?”, escribió Pachón.
El senador Petro se sostuvo en su afirmación, porque según él, en medio de la crisis de los paperos, asumir los costos de empaquetado solo encarecía la producción a los campesinos.
“Simple Carlos. Si el directo productor de papa pudiera lavar, comprar bolsas plásticas y disminuir el tamaño del empaque implicaría elevar sus costos cuando el precio está por debajo de los costos. Esa bolsa es de un intermediario que compró en nada la papa al campesino”, sostuvo el senador.
Carlos Amaya tardó unas en contestar, pero mantuvo el debate y publicó una fotografía de las lavadoras de papa que habían entregado a grupos de campesinos y criticó a Petro por, aparentemente, no haber comprado papa en la jornada de apoyo.
“Senador, como debe saberlo, la mejor forma de que pequeños productores sean competitivos es asociándose y agregando valor a sus productos. Por eso, se entregaron lavadoras a asociaciones y hoy venden papa lavada. Y lo simple es que Ud. hoy sea #BuenaPapa y salga a comprarles”, escribió Amaya.
La alcaldesa Claudia López asistió el sábado a uno de los puntos que autorizó la administración distrital para que los campesinos ofrecieran sus productos. El bulto que compró y aparece en la fotografía, era de uno de esos puestos y el empaquetado se debía a que es una cantidad menor que la del bulto completo.
La papatón de la administración distrital se ha organizado en los peajes de Bogotá y Cundinamarca y en otros parques al interior de la ciudad. Como una medida para dar respuesta a la crisis que enfrenta ese sector agrícola a causa de la baja de los precios que ha afectado a los campesinos.
López, finalmente indicó que la jornada, para este lunes festivo, había logrado la venta de más de 1.300 toneladas de papa directa de campesinos y sin intermediarios, en respuesta a las críticas que había recibido.
Los orígenes de esa crisis no son claros, algunos indican que se debe a la importación de papa que ha copado el mercado y desplazado parte de la oferta nacional, aunque algunos indican que las importaciones son menores y no tienen repercusión.
Así mismo, se ha acusado a los intermediarios de manipular los precios para obtener mayores ingresos en su labor de ubicar el producto en el destinatario final.
