La mayoría de los hombres tienen como objetivo principal en el sexo, retrasar al máximo la eyaculación para disfrutar por más tiempo el encuentro sexual, sin embargo, para algunos hombres no se trata de una elección, simplemente no eyaculan o explusan el semen hacia dentro. Esto se conoce como ‘orgasmo seco’ y es mucho más frecuente de lo creemos, pues muchos casos están relacionados con el envejecimiento.
La mayoría de los informes sobre los orgasmos secos ocurren después de una cirugía de vejiga o extirpación de la próstata. Ambos procedimientos pueden hacer que no se produzca esperma, lo que significa que no se eyacula cuando se consigue el clímax.
Ignacio Moncada, jefe de Urología del Hospital Universitario Sanitas La Zarzuela, en Madrid, explica que el orgasmo seco es “la ausencia de eyaculación cuando se tiene un orgasmo”. No se debe confundir con la anorgasmia, “en la que lo que no se tiene es el orgasmo”, ya que sí se experimenta “la sensación placentera del orgasmo y la contracción de los músculos bulboesponjosos, que expulsan el semen, pero no sale semen”.
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El orgasmo seco “no suele provocar ninguna molestia ni limita la satisfacción sexual, que viene derivada del orgasmo y no de la cantidad de semen que se expulsa”, afirma Moncada.
Desde el punto de vista físico, un orgasmo es un orgasmo, independientemente de lo que lo acompañe. Es importante analizar esta condición desde la parte psicológica, pues en algunos hombres, la ausencia de eyaculación puede afectar la experiencia de sentir placer sexual. En estos casos, es importante consultar a un sexólogo para afrontar esta nueva situación.
El estrés y otros problemas psicológicos también pueden causar orgasmos secos, pero esto con frecuencia depende de la situación. Se puede tener un clímax y eyacular normalmente durante un encuentro sexual, pero no en otro.
Lo que sí limita significativamente el orgasmo seco son las posibilidades de ser padre. Moncada apunta, no obstante, que se da generalmente “en hombres mayores que ya no desean tener hijos”.
Cuando se trata de hombres más jóvenes, existen diferentes tratamientos que pueden ayudar a que tengan descendencia. Por ejemplo, para aquellos que han sufrido un tumor de testículo, así como en los lesionados medulares jóvenes, existen técnicas de reproducción asistida que les permiten tener hijos mediante la extracción de espermatozoides del testículo.
También se han desarrollado procedimientos para operar la hiperplasia benigna de próstata que evitan la eyaculación retrógrada y algunos medicamentos para esta enfermedad que producen menos aneyaculación que otros, como la dutasterida.
El tratamiento para ausencia de eyaculación dependerá directamente de las causas, es decir, si son orgánicas o psicológicas, y además del tipo, que puede ser primario o secundario a otras patologías. Las causas de origen orgánico deberán abordarlas los urólogos, mientras las de carácter psicológico corresponden a sexólogos y psicólogos.