Muchas personas piensan que el estrés es simplemente un periodo de tiempo, una emoción y que no tiene nada que ver con las enfermedades, sin embargo, no es así, sufrir de estrés podría desencadenar múltiples enfermedades y complicaciones para la salud.
Para empezar el estrés es un sentimiento de tensión física o emocional que puede ser causado por cualquier situación o pensamiento que tenga que ver con sentimientos de frustración, miedo, nerviosismo, entre otros.
Probablemente en alguna ocasión usted ha experimentado estrés, lo que es completamente normal, hasta que no se le da un buen manejo, motivo por el que terminan desarrollándose ciertos inconvenientes de salud.
Dentro de algunas de las enfermedades que se pueden encontrar como consecuencia del estrés están la diabetes, la obesidad, afectaciones para la salud mental como ansiedad o depresión, problemas de la piel, insuficiencia cardiaca y presión arterial. En el caso de las mujeres los problemas con los ciclos menstruales también pueden ser frecuentes.
Estas enfermedades que tienden a comprometer diferentes partes del cuerpo son más comunes en personas que manejan niveles de estrés elevados, es decir que sienten cansancio mental causado por un rendimiento que es superior al normal y que se traduce en un conjunto de alteraciones que se producen en el organismo como respuesta a esos estímulos que pueden ser de diversos tipos.
La presión sanguínea es algo a tener en cuenta cuando se menciona al estrés, pues hay enfermedades coronarias que están directamente señaladas. Los ataques cardíacos y las enfermedades cardiacas son un ejemplo de ello, que además en Colombia son la primera causa de muerte.
Otras de las enfermedades a revisar son las de la piel, pues el estrés crónico puede generar resequedad, problemas cutáneos y picazón. Incluso algunas personas experimentan descamación, acné. En el conjunto de afectaciones a la estética también se encuentra la caída del cabello, sudor excesivo, rosácea, uñas quebradizas y urticaria.
Unas de las enfermedades más frecuentes en la población son los problemas digestivos como la enfermedad del colón irritable, gastritis, náuseas, diarreas, e inflamación, así como dolor abdominal, enfermedades que son muy incómodas y dolorosas en algunos casos.
Estas enfermedades se relacionan mucho con los problemas de salud mental, específicamente con la ansiedad y la depresión que cada vez se vuelven más frecuentes en la población. Aunque aún muchas personas no entiendan el importante papel que juega cuidar de la salud mental, es quizás este uno de las enfermedades que requiere más atención, pues encadena una a una varias de las enfermedades aquí mencionadas.
Algunos de sus síntomas se presentan con insomnio, ataques de pánico, neurosis que son muy frecuentes en personas que llevan ritmos de vida muy acelerados.
Los expertos recomiendan mantener hábitos saludables en la rutina del día a día, así como hacer pausas, no dejar de comer ni dormir bien. En caso de estar experimentando algún malestar relacionado con lo descrito debe acudir de inmediato a un médico para que evalúe cuál es su situación.