Los lineamientos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos que esta semana se divulgaron por internet aclaran lo que sabemos sobre los métodos de transmisión del coronavirus.
El virus no se propaga fácilmente mediante superficies contaminadas, según los CDC. Para quienes estaban preocupados sobre frotar con toallitas húmedas las bolsas de víveres o desinfectar paquetes que llegaron por correo, los titulares informativos que destacan esta información en días recientes pudieron haber brindado algo de alivio.
No obstante, la información no es nueva: durante meses los CDC han dicho eso. En todo caso, los titulares han enfocado más la atención sobre lo que ya sabemos del virus.
Se cree que el coronavirus se propaga principalmente de una persona a otra, generalmente a través de gotas diminutas cuando una persona infectada estornuda, tose o habla de cerca —incluso si esa persona no presenta síntomas—.
“El virus que causa la COVID-19 se propaga muy fácilmente y de manera sostenida entre las personas”, mencionan los CDC en su sitio web. “La información sobre la actual pandemia de COVID-19 indica que este virus se propaga de manera más eficiente que la influenza, pero no tan eficiente como el sarampión, que es altamente contagioso”.
El sitio web también afirma que las personas pueden infectarse de coronavirus al “tocar una superficie u objeto que tiene el virus y después tocarse la boca, la nariz o posiblemente los ojos”. Sin embargo, esas “no son consideradas como las principales maneras en las que el virus se propaga”.
Según versiones archivadas del sitio web que están disponibles en línea, esta información ha permanecido en gran medida sin cambios desde por lo menos finales de marzo.
El formato del sitio web de los CDC fue ligeramente modificado este mes, pero la información sobre las superficies permaneció igual.
Al parecer, fue ubicada debajo de un nuevo apartado —"El virus no se propaga fácilmente de otras maneras"— el 11 de mayo, y también agregaron más información sobre la dificultad para contagiarse del virus a través de los animales.
Kristen Nordlund, una vocera de la agencia, dijo a The Washington Post que las modificaciones se debieron a una revisión interna y eran producto de “pruebas de usabilidad”.
“Nuestro lenguaje sobre los métodos de transmisión no ha cambiado”, dijo Nordlund. “La COVID-19 se propaga principalmente a través del contacto cercano de persona a persona”.
Expertos en los CDC y todo el mundo todavía están aprendiendo sobre este coronavirus.
Existen preguntas sobre cómo la densidad de las partículas del virus podrían afectar las tasas de transmisión.
Los investigadores todavía no saben si todas las gotas expulsadas durante el habla, la tos y los estornudos portan las partículas que son igual de infecciosas o si una cantidad específica de virus es necesario que sea transmitida para que una persona se enferme al aspirarlas.
Un estudio divulgado la semana pasada descubrió que tan solo con hablar se pueden lanzar miles de pequeñas gotas al aire y que estas pueden permanecer suspendidas entre ocho y catorce minutos.
Parece que el virus se propaga con mayor facilidad cuando las personas están en contacto cercano una con la otra —por ejemplo, en una conversación— o reunidas en espacios con escasa ventilación, dijo Linsey Marr, una científica de aerosoles en Virginia Tech.
Dijo que para que una persona se contagie del virus a través de una superficie, parece que algunas cosas tendrían que pasar. Primero, el virus tendría que ser transmitido a la superficie en cantidades suficientemente grandes.
Después, tendría que sobrevivir en esa superficie hasta que fuera tocado por alguien más. E incluso si finalmente fuera transferido a, digamos, el dedo de una persona, tendría que sobrevivir en la piel hasta que esa persona se tocara un ojo o la boca.
“Simplemente hay muchas más condiciones que tienen que cumplirse para que la transmisión ocurra a través del contacto con esos objetos”, dijo Marr.
Mucho de lo que sabemos sobre cuánto tiempo vive el virus en superficies proviene de un estudio publicado en The New England Journal of Medicine en marzo.
La investigación descubrió que el virus puede sobrevivir, en condiciones idóneas, hasta tres días en superficies metálicas duras y plástico y hasta veinticuatro horas en cartón.
Ya que contagiarse de coronavirus a través de una superficie contaminada todavía es considerada una posibilidad, las personas que prefieren frotar con toallitas húmedas bolsas, cajas o bancas en el parque pueden seguir haciéndolo.
Los CDC recomiendan lavarse las manos a menudo y limpiar de manera regular o desinfectar las superficies que son tocadas son frecuencia.
Por: Jacey Fortin