En un alarmante incidente ocurrido en el sector de San Diego, Medellín, un motociclista intentó evadir un control de Pico y Placa y terminó atropellando a un agente de tránsito.
Este suceso tuvo lugar en la carrera 43 con calle 37, cerca de la emblemática avenida Las Palmas, un área frecuentada por automovilistas y motociclistas por igual.
El motociclista, al percatarse de que iba a ser sancionado por no cumplir con la normativa de tránsito, decidió escapar de la autoridad. En su intento de huir, arrolló al agente de tránsito que le había indicado detenerse. El impacto dejó al oficial con lesiones leves, por lo que fue trasladado de inmediato al Hospital General de Medellín para recibir atención médica.
La rápida intervención de la Policía Metropolitana permitió la captura del motociclista poco después del incidente.
El agresor fue llevado a la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, mientras que su moto fue inmovilizada en el lugar de los hechos. Este tipo de comportamiento no es aislado; ya en lo que va de 2024 se han registrado 48 ataques contra agentes de tránsito en la ciudad, lo que ha encendido las alarmas sobre la seguridad de estos funcionarios.
La Secretaría de Movilidad de Medellín no solo condenó el ataque, sino que también anunció su apoyo al agente agredido en el proceso legal contra el motociclista. Este episodio destaca la urgencia de un llamado a la conciencia a todos los conductores para que respeten las normas de tránsito y a quienes las hacen cumplir.
El director de la Secretaría de Movilidad subrayó que "los agentes de tránsito son garantes del orden en las vías y merecen respeto.
Los comportamientos violentos no solo ponen en riesgo la vida de los funcionarios, sino también la de todos los usuarios de las vías".
Este no es el primer incidente violento contra agentes de tránsito en la ciudad. Solo una semana antes, el 16 de septiembre, otro agente fue embestido por un motociclista en la Avenida Oriental mientras realizaba un operativo de control.
Al igual que en el caso reciente, el motociclista, quien trabajaba para aplicaciones de transporte, intentó escapar pero fue finalmente capturado por las autoridades.
Estos eventos han planteado serias preguntas sobre la seguridad y la integridad de los agentes de tránsito en Medellín. La reiterada violencia en su contra pone de relieve un problema más amplio relacionado con el respeto a la autoridad y la necesidad de fomentar un ambiente más seguro en las vías.