Colombia amaneció celebrando el triunfo 1-0 de la Selección Colombia femenina frente a Argentina, un encuentro que selló el paso de las guerreras cafeteras a la final de la Copa América femenina y de paso a los Juegos Olímpicos y el Mundial de Mayores que se disputará en Australia en el 2023. Una victoria celebrada por todo el Estadio Alfonso López de Bucaramanga, que en la jornada de ayer estuvo repleto de hinchas.
Lo cierto es que fue un partido complicado para la Selección Colombia, con varias oportunidades de gol para abrir el marcador en el primer tiempo, pero con dificultad para anidar en la cancha. Sin embargo, en la segunda parte fue la delantera Linda Caicedo quien terminó balanceando el marcador con un gol en el minuto 63’.
Así las cosas, cómo no tener semejante apoyo, teniendo en cuenta que la Selección Femenina ha tenido una campaña prácticamente perfecta en la Copa América con una racha de de cinco partidos ganados. Convirtiéndose, de paso, en una de las selecciones más potentes del continente.
Al momento han sido cientos de mensajes de felicitaciones que han recibido las ‘guerreras’ de la Selección, que ahora pasarán a disputar la final de la Copa América frente a Brasil o Paraguay el próximo 30 de julio, dependiendo del resultado del partido que se disputa este martes a las siete de la tarde (hora colombiana).
Aún así, incluso obteniendo el segundo lugar, la selección femenina de fútbol de Colombia ya se llevaría un botín de 500 mil dólares y en caso de lograr la Copa ese premio sería de 1,5 millones de dólares. Premio que se suma a las ganancias por la asistencia masiva al Estadio y que corresponde a una retribución importante teniendo en cuenta los pocos apoyos con los que cuenta el fútbol femenino en el país.
No obstante, tan solo con la hazaña de haber llegado a la final, de haber triunfado a lo largo de la Copa América y clasificar a cuanto torneo de la más grande importancia mundial se propusieron, ya marca un hito en la lucha que actualmente cursa el fútbol femenino por tener el reconocimiento que se merece en Colombia. De hecho, el apoyo no solo fue en el encuentro, sino que se vio reflejado como una masiva lluvia de comentarios en redes sociales.
Críticas a la Dimayor y a la Federación
En medio de la euforia por el triunfo de la Selección, no faltaron las críticas a la Dimayor luego de que esta ‘sacara pecho’ por los resultados de las ‘guerreras’ de la Tricolor, a través de un comunicado en el que les deseo el mejor de los futuros en los retos que se avecinan.
“La DIMAYOR felicita tanto a la Federación Colombiana de Fútbol como a las jugadoras por el paso a la gran final del certamen continental y les augura los mejores éxitos”, señaló el comunicado de la entidad.
Otra criticada fue la Federación Colombiana de Fútbol, sobre todo por las declaraciones de su presidente, Ramón Jesurún, quien le manifestó a WinSports que considera a las jugadores sus “hijas” y resaltó el poder del fútbol colombiano.
“Hoy logramos ese objetivo con estas niñas, esas muchachas maravillosas, entregadas a ese objetivo que todos teníamos: ir al mundial de fútbol nuevamente y volver a los Juegos Olímpicos (...) Me llenaron de agua, la verdad es que tengo una relación con ellas muy linda, las adoro, las tengo a todas como a mis hijas, de pronto a algunas como mis nietas”, señaló Jesurún a una periodista del medio.
Rápidamente, tanto la respuesta de la Dimayor como la de Jesurún obtuvieron una gran cantidad de críticas, sobre todo porque es de público conocimiento la lucha que muchas de ellas libran desde hace meses por dejar en evidencia las malas condiciones laborales, la falta de apoyo por parte de las principales entidades deportivas y la ausencia de liga de fútbol femenina en el segundo semestre de 2022.
De hecho, esta lucha ya alcanzó momentos icónicos como cuando inaugurando la primera ronda de la Copa América contra Paraguay, las jugadoras de la Selección levantaron sus puños durante el himno nacional en señal de protesta contra la cancelación de su Liga. Una espina más en la carrera de unas jugadoras que dejan en alto la bandera colombiana en el mundo, pero que muchas veces tiene que alternar con otras ocupaciones por la falta de recursos.
