En un movimiento que ha sacudido el panorama político y mediático de Colombia, Vicky Dávila anunció su retiro como directora de la revista Semana, con el fin de dar un paso firme hacia su precandidatura presidencial para las elecciones de 2026. En una carta emotiva publicada por el medio, Dávila no solo se despidió de sus colegas y lectores, sino que también delineó las bases de lo que podría ser su futura visión política, un mensaje cargado de compromiso y crítica a la situación actual del país.
En su misiva de despedida, la periodista se mostró firme en su convicción de haber cumplido con su deber como periodista, destacando la importancia de ejercer un periodismo libre y sin restricciones. Ella hizo hincapié en que la libertad de prensa ha sido uno de los pilares de su carrera, tanto en Semana como en otros espacios, y agradeció a los propietarios de la revista por permitirle llevar a cabo su labor sin interferencias de intereses empresariales. A lo largo de su carrera, Dávila ha sido una figura polémica y admirada, conocida por su estilo incisivo y su capacidad para exponer las verdades incómodas de los poderosos.
"Me voy de Semana con la tarea cumplida. A mis compañeros del alma les pido que sigan adelante, que la prensa libre es una garantía en una democracia", escribió Dávila, quien también destacó el papel de la crítica en su trabajo, llamando a sus lectores y colegas a ejercer esa misma actitud frente a ella como futura precandidata. “El pueblo debe ejercer con la misma firmeza que yo, exigiendo siempre transparencia y responsabilidad a los gobernantes”, manifestó.
El giro hacia la política parecía ser solo cuestión de tiempo para la periodista, que ya había mostrado en sus intervenciones públicas un creciente interés por transformar el país. En su carta, Dávila dejó claro que uno de los mayores desafíos de Colombia es superar el miedo y el conformismo que, según ella, han caracterizado a la política nacional. Su visión de un nuevo liderazgo resalta la necesidad de "resetear la política" y de devolverle el poder a los ciudadanos, advirtiendo que el presidente debe ser, ante todo, un servidor público y no un líder arrogante.
“La elección de Petro tiene mucho que ver con la debacle política y las promesas no cumplidas de quienes lo precedieron. La decepción popular permitió que la peor izquierda se infiltrara en el poder, camuflándose bajo la bandera del cambio”, señaló Dávila, quien también hizo referencia a la necesidad urgente de encontrar soluciones a las carencias que aquejan a los colombianos.
La lucha contra la corrupción
En su misiva, Dávila también se mostró orgullosa de las investigaciones de Semana bajo su liderazgo, en especial aquellas que expusieron actos de corrupción dentro del Gobierno del presidente Gustavo Petro. Entre los momentos más destacados de su carrera, recordó la revelación de testimonios clave que involucraron a altos funcionarios del gobierno en escándalos de corrupción. "Logré el primer testimonio de Olmedo López, su primera confesión en público que comprometía a ministros y otros altos funcionarios", recordó, haciendo referencia a uno de los casos más sonados de su gestión.
Estas investigaciones, que le valieron tanto aplausos como críticas, reflejan el compromiso de Dávila por revelar la verdad, sin importar las consecuencias. Su enfoque en la transparencia y en la lucha contra la corrupción será, sin duda, uno de los temas centrales de su campaña presidencial.
Reflexión sobre la Colombia que soñó
A lo largo de su carta, Dávila también se detuvo a reflexionar sobre los momentos más destacados de su carrera, aquellos que la hicieron sentir el verdadero espíritu del país. Hizo alusión a la alegría vivida junto a los colombianos con las victorias deportivas de figuras como Nairo Quintana, James Rodríguez, Shakira, y otros íconos nacionales. Sin embargo, no dejó de lado las sombras que persisten en la sociedad colombiana, como la violencia generada por el narcotráfico y sus tentáculos en el gobierno.
"Los momentos de horror que hemos vivido como nación, especialmente a causa de la lucha contra el narcotráfico, son una herida profunda que sigue abierta. A pesar de ello, los colombianos seguimos adelante con esperanza", escribió Dávila, subrayando su profundo amor por su país, pero también su preocupación por los desafíos que aún enfrenta.