La reciente llegada de los vagones del Metro de Bogotá enfrascó nuevamente al senador Gustavo Bolívar y al exalcalde Enrique Peñalosa en una discusión por medio de Twitter. Mientras que Peñalosa celebró el arribo de los trenes a Barranquilla, el congresista del Pacto Histórico demeritó la noticia y cuestionó nuevamente los estudios del Metro elevado que se piensa construir en Bogotá.
“Vagones del Metro de Bogotá que contratamos siendo desembarcados en Barranquilla. Aunque el proyecto está muy avanzado Petro insiste en tratar de pararlo”, escribió inicialmente el también excandidato presidencial Enrique Peñalosa, enviando una sátira al hoy presidente Gustavo Petro, cercano a Bolívar, y con quien desde siempre ha sido un férreo opositor. Una rivalidad que se remonta incluso a cuando Petro fue alcalde de Bogotá entre el 2012 y el 2015.
El anuncio de Peñalosa no le cayó para nada bien a Gustavo Bolívar, quien pronto le replicó las “buenas nuevas”, considerando que aún no se pueden colocar en uso porque falta la infraestructura principal. Las vías.
“¡Hazaña! Llegan vagones de un Metro que aún no tiene estudios Fase III. ¡Payasada! ¿Los van a guardar 7 años mientras construyen el orinal de 23 kms que ud contrató? (Lo de orinal lo dijo ud.) Sea serio. #SeEquivocan De aquí a inaugurar serán obsoletos y estarán deteriorados”, le cuestionó Bolívar, señalando además los gastos que deberá asumir la ciudad por cuenta de su almacenamiento hasta su puesta en funcionamiento.
“¿Cuánto cuesta el almacenamiento de estos vagones durante varios años? Y se jactan de tener más estudios y haber pasado por las grandes universidades del mundo pero les falla lo más elemental: El sentido común, la lógica, las matemáticas básicas, la planeación ¡La planificación!”, acotó Bolívar evidentemente molesto.
Aunque Peñalosa no ha respondido a los ataques de Bolívar, sí aprovechó la llegada de los vagones para atacar a la actual alcaldesa de Bogotá, Claudia López, por demandar el proyecto inicialmente solo para “cambiar politiqueramente el color de los trenes”.
“Claudia López demandó el Metro que contratamos antes de llegar a la alcaldía, para parar el proyecto. Lo único que hizo con el Metro fue cambiar politiqueramente el color de los trenes, partido Verde, que eran rojos como parte de la identidad de la ciudad”, escribió Peñalosa.