De un día para el otro Therese Kozlowski comenzó a sentirse cansada, débil, con nauseas y la visión borrosa. Al principio no sabía qué era lo que le pasaba, desconocía el porqué su cuerpo reaccionaba de esa manera.
Así estuvo por varios días de julio del 2018, hasta que se fue dando cuenta que presentaba esos síntomas luego de tomar el café que le preparaba diariamente su esposo, Brian Kozlowski, al que le había pedido el divorcio dos meses antes.
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La investigación arrojó que el sujeto había vertido difenhidramina, una solución que causa sedación. El café tenía 127 mililitros de la droga.Tras un año de proceso, Brian Kozlowski se declaró culpable y en la última semana la justicia norteamericana lo condenó a solo 60 días de cárcel, los cuales deberá pagar solo los fines de semana. El hombre también fue sentenciado a cinco años de libertad condicional. Therese y su defensa se mostraron indispuestos por la pena impuesta en contra del Brian. Aseguran que lo que hizo fue "un intento claro de asesinato", así que apelarán a la decisión. Además: El fiscal del caso, Eric Smith, señaló a través de Twitter que: "El Tribunal parecía más centrado en garantizar la libertad y la capacidad de trabajo del acusado que la seguridad de la víctima". Agregó que es preocupante pensar que alguien que comete un delito tan imprudente y pone a tanta gente en riesgo,"se aleje solo con una palmada en la muñeca". https://twitter.com/ProsecutorSmith/status/1156991606299471872