El último documental que lanzó Netflix ha causado revuelo en el mundo por sus polémicas denuncias sobre el tratamiento que le dan las redes sociales a los datos de los usuarios. The Social Dilemma o el Dilema de las redes sociales generó tal impacto que Facebook tuvo que salir a defenderse.
La producción expone cómo la digitalización de nuestra vida cotidiana y la combinación con los negocios que promueven las redes sociales ha incrementado problemas como falta de privacidad, algoritmos peligrosos y un poder de persuasión que se hace incontrolable.
Tristan Harris, ex especialista en ética del diseño de Google; Co-fundador y presidente del Center for Humane Technology, afirma que la tecnología se desvió del camino, puesto que, se han creado algoritmos que sin controlarlo logran persuadir a millones de personas en el mundo.
Estos algoritmos son creados para que cada vez tengan más precisión, es decir, para que envíe la notificación, publicidad, o contenido preciso en el momento adecuado. De esta forma logran que los usuarios de redes sociales pasen sus horas en las plataformas consumiendo anuncios y entregando información que ayudará en el perfeccionamiento de la inteligencia artificial que desarrollan día a día.
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Las empresas de internet trabajan bajo un modelo de negocio en el que conectan anunciantes con usuarios relevantes. Para tener éxito en esta estrategia deben recopilar datos de sus usuarios para segmentarlos según sus intereses. Estos grupos de personas son ofrecidos a los anunciantes donde se realizan ofertas para que sus anuncios se destaquen en grupos específicos.
“Si no pagas por el producto, entonces tú eres el producto”.
Otra de las grandes revelaciones que hace este documental es la grave afectación a la salud de las personas que usan redes sociales constantemente. Un estudio realizado a 5.000 personas encontró que un mayor uso de las redes sociales se correlacionó con disminuciones autoinformadas en la salud mental y física y la satisfacción con la vida.
Para este importante tema KienyKe.com consultó a Manuela Ariza, psicóloga especializada en marketing y comportamiento del consumidor. Explicó que los anuncios invasivos si puede afectar la salud cuando hay sobre exposición a ellos. "Si pasas horas en redes tu sistema inmunológico se debilita paulatinamente, ahora, si lo que ves en redes no es positivo el daño abarcará otras zonas cómo el autoestima principalmente”.
“La publicidad en las redes sociales está por todas partes, no hay forma esquivarla o posibilidad de elegir si recibirla o no. Lo particular es que no se presenta como "Hola, soy publicidad", aparece en una prenda y si logran persuadirte no estarás tranquilo hasta comprarla”, comentó Ariza.
Básicamente la publicidad en las redes sociales brinda a cualquier persona la oportunidad de llegar a un gran número de personas con una facilidad fenomenal, brindando a los malos actores las herramientas para sembrar disturbios y alimentar divisiones.
“Cuidamos nuestras vidas alrededor al sentido de perfección porque somos recompensados en estas señales a corto plazo. Pueden ser con ‘Me gusta’, ‘Corazones’, ‘pulgares arriba’, mezclamos ese valor y lo mezclamos con la verdad. En su lugar, realmente es una falsa y frágil popularidad que a corto plazo te deja aún más vacío incluso más que antes de que lo hicieras”, Chamath Palihapitiya.
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Justin Rosestein, ex director de ingeniería en Facebook y ex gerente de producto en Google, sostiene que hablar de inteligencia artificial es una metáfora, las miles de computadoras que tienen compañías como Google contienen algoritmos tan complicados que ya hacen parte de la inteligencia.
Facebook recibió millones de críticas luego del lanzamiento de esta producción, por lo que debió emitir un comunicado para defenderse de las múltiples acusaciones. “Debemos tener consideraciones sobre el impacto de las redes sociales en nuestras vidas, pero The Social Dilemma ha enterrado la sustancia en el sensacionalismo“.
Sostienen que en lugar de ofrecer una visión matizada de la tecnología, da una vista distorsionada de como las plataformas de redes sociales trabajan para crear un chivo expiatorio conveniente para los que son problemas sociales difíciles y complejos.
La compañía de Mark Zuckerberg asegura que construye sus productos para crear valor, no para que sean adictivos. Además defiende la implementación de algoritmos específicos como el que añadió en 2018 que ordena las novedades en el feed de los usuarios para dar más peso a sus relaciones familiares y sociales que a los videos virales. Todo esto como argumento de defensa ante la supuesta manipulación en el contenido que muestran a los sus usuarios.
Si bien la reflexión final la debe sacar cada quien viendo el documental, es cierto que se hace necesario que las personas se eduquen sobre las capacidades de las redes sociales. Estas nuevas herramientas no van a desaparecer, ni a cambiar su modelo de negocio para mejorar la confianza y la salud de sus usuarios, pero con un mejor manejo su poder de persuasión no será tan impactante.
En la página web del documental encontrará consejos para sacarle un mejor provecho a la tecnología, también podrá recibir consejos para iniciar conversaciones en persona y así juntar a la sociedad reiniciando el uso de las redes sociales.