Los cantos fúnebres y los cuentos de los abuelos de Quibdó, preparación de coloridos trajes por parte de los jóvenes que cada año participan en las fiestas de San Pacho, o limpieza de un caserío, entre otras actividades, se constituyen en una posibilidad para desarrollar procesos regionales de paz.
Esta recopilación de saberes, realizada por estudiantes de Terapia Ocupacional de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) y que les mereció el Premio Otto de Greiff a los mejores trabajos de grado en la categoría “Salud”, se llevará a otras regiones del país para contribuir a los procesos de construcción de paz durante la etapa del posconflicto.
Con esta experiencia, los estudiantes elaboraron una “caja de herramientas” basada en la metodología Investigación-Acción Participativa, del sociólogo Orlando Fals Borda, la cual se describe como un “método de aprendizaje mutuo entre intelectuales y pequeños grupos de base en que los conflictos políticos encuentran una posible solución en la participación social”.
Durante dos meses y medio, los estudiantes de la U.N. compartieron el día a día con comunidades de Quibdó (Chocó) y Vigía del Fuerte (Antioquia) afectadas por el conflicto armado, y encontraron que las ocupaciones colectivas permiten crear y consolidar lazos de confianza entre los miembros de un mismo conjunto de personas.
Para ello, participaron con habitantes de estas poblaciones en actividades cotidianas como juegos de dominó, preparación de cachés (trajes para las tradicionales fiestas de San Pacho) o limpieza del caserío.
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“Al llegar a Quibdó encontramos un grupo de jóvenes que realizaba muestras de danzas, entre ellas la chirimía; y abuelos, la mayoría desplazados por la violencia, que acostumbran reunirse en las tardes para jugar dominó, cantar alabaos y contar cuentos”, destaca Paula Andrea Rodríguez Sotelo, una de las estudiantes de Terapia Ocupacional, quien realizó el trabajo con Carlos Julio Rivera Caballero y Kelly Tatiana Cetina Matallana.
“Estas reuniones son muy importantes porque nos permiten conocer quiénes somos, de dónde venimos y para dónde vamos”, destaca la señora Ananibal, del grupo de adultos mayores.
En el caso de los reincorporados de Vigía del Fuerte, el grupo se ha ido consolidando alrededor de tareas colectivas como jornadas de limpieza, construcción de canchas de fútbol y rozado del monte.
La asociación de mujeres, otro de los grupos, busca sacar adelante algunos proyectos productivos que les permitan darle un nuevo significado a su rol como mujeres y hacerle frente a problemas asociados con el machismo.
Por su parte Albeiro José Olaya, del grupo de reincorporados de las FARC, comenta que “durante veinticuatro años estuve en el movimiento, y ahora nos reunimos para realizar acciones encaminadas a mejorar las condiciones de la comunidad, como la construcción de canchas de microfútbol, rellenos sanitarios y obras para evitar el represamiento de ríos”.
La tesista resalta que “cuando las personas trabajan en grupo se crea confianza, los miembros dejan de ver al otro como un potencial agresor para considerarlo como un punto de apoyo y generar principios de identidad”.
En tal sentido, el trabajo con los distintos grupos se concentró en acompañar el reconocimiento de los logros alcanzados como colectivo, pese a las múltiples dificultades enfrentadas, de tal manera que identificaran sus habilidades conjuntas.
Ocupaciones colectivas
Después de la estrategia de aproximación –que incluía llevar una serie de diarios de campo, fotografías y grabaciones– con el software NVivo se sistematizaron las experiencias a partir de cinco categorías: 1) hacer cooperativo, que es el trabajo en equipo y la distribución de roles para recoger fondos para los caché, por ejemplo; 2) cultura, que gira alrededor de sus tradiciones y costumbres como colectivo; 3) territorio, que es el lugar donde se unen, se encuentran y se ocupan; 4) sentido de dignidad y resistencia, como seres que han experimentado importantes episodios de vulnerabilidad o hechos violentos como la inseguridad en su barrio; y 5) ideología, que se refiere a los valores y principios de mujeres, abuelos, excombatientes y amigos.
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Producto de este ejercicio se diseñó la caja de herramientas, que se compone de dos partes: una, la cartilla que describe las comunidades y las ocupaciones que desarrollan para construir la paz en sus territorios, y otra con la propuesta de una serie de actividades, con sus respectivos materiales, para que estos aprendizajes y experiencias se compartan en otras regiones del país.
Para la estudiante Rodríguez, uno de los aportes más llamativos de este trabajo es que “como academia no llegamos a imponer nuestros conocimientos ni a ignorar lo que ellos han construido; por el contrario, compartimos y escuchamos sus relatos en sus casas, en la calle, en salones comunales para reconocer sus saberes; visitamos barrios como Kennedy, donde los jóvenes del programa “Pueblos en movimiento” participan en las fiestas de San Pacho, o La Cascorva, espacio del que se apropiaron los abuelos desplazados”.
Por ahora la idea es que las cajas de herramientas producto de este trabajo se aprovechen en otras zonas del país y por los mismos estudiantes de Terapia Ocupacional de la U.N., como parte de su proceso de aprendizaje.
Con información de Unimedios.
Los cuentos de los abuelos que construyen paz
Mar, 07/05/2019 - 13:37
Los cantos fúnebres y los cuentos de los abuelos de Quibdó, preparación de coloridos trajes por parte de los jóvenes que cada año participan en las fiestas de San Pacho, o limpieza de un caserío