El talento y reconocimiento de Emmanuel Restrepo alcanzó su pico más alto al ponerse en la piel de Camilo Granados y protagonizar con este personaje, La Primera Vez, serie colombiana de Netflix. El antioqueño aceptó nuestra invitación a conversar y en este espacio contó detalles inéditos de su historia de vida.
Todo arranca con Albeiro Restrepo, un joven del barrio Rosellón de Envigado, quien decidió inscribirse en 'El Nocturno', una institución educativa de esa ciudad que funcionaba en las noches. Ahí, Restrepo gestó la que sería su relación más importante cuando conoció en medio de los libros, letras y números a Luz María Zapata, una joven del barrio La Mina.
Se enamoraron y el amor creció junto con ellos, construyendo historia que cada día fue llenándose de diferentes capítulos. El más álgido, cuando Restrepo decidió irse a Estados Unidos para establecer su proyecto de vida. Al poco tiempo de instalarse en tierras norteamericanas, envió un dinero a su país con la finalidad específica de que Luz María viajara para estar juntos de nuevo y continuar así su relación.
Así fue, su reencuentro fue inminente así como la extensión de su idilio de amor. La solidez de su compañerismo se materializó con el nacimiento de su primera hija, convirtiendo sus más nobles características en una familia. Tiempo después, decidieron volver a su país, había una necesidad importante de retornar a Colombia.
Ese periplo se llevó a cabo y tuvo su razón de ser el 16 de noviembre de 1.992 con el nacimiento de Emmanuel, su segundo hijo, quien llegó al mundo en el retornado proyecto de la familia por reafirmar sus raíces.
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Los primeros años de Emmanuel Restrepo
"Recuerdo mucho jugar solo. Jugaba mucho en mi casa. Yo jugaba a administrar una empresa de trenes, yo tenía diferentes temáticas y le pedía a mi mamá unos sellos para tener el negocio bien montado. Utilizaba mucho la imaginación por lo que jugaba solo, pues mi hermana era cinco años mayor y el juego quizás no estaba ya en sus actividades principales, además, el barrio era una urbanización en la que no se gestó un grupo de amigos cercanos, entonces desarrolle esta etapa al interior de mi casa", dice Emmanuel respecto a sus primeros años de vida.
La percepción de Emmanuel sobre su personalidad en ese tiempo, es la de un niño muy tímido y callado, con habilidades sociales limitadas. Sin embargo, su familia piensa todo lo contrario, pues narran historias en las que Emmanuel hablaba "inglés" en una representación de un español con acento americano, en las que bailaba y hacía actos cómicos, sin embargo, él no tiene recuerdos de eso, pero si tiene muy claro ese impulso y apoyo artístico que sintió por parte de los suyos.
Recuerda sentirse cómodo con las invitaciones que su familia impulsaba para que recitara algo, contara un chiste o bailara para enorgullecer el cariño de los más cercanos. Desde ese momento, Emmanuel empezó a montar shows caseros en los que se inventaba un montón de recursos como sonidos, música, luces y efectos. El más recordado, es la recreación del nacimiento de Jesús, narrando una historia con actuación y creatividad.
La Etapa Escolar de Emmanuel Restrepo
"Odié mi etapa del colegio. Había mucho bullying. Era un ambiente muy cuadriculado y unas ganas de encuadrar las mentes de pertenecer a unos cánones preestablecidos, no había un incentivo el librepensamiento", asegura Emmanuel de esta etapa.
Ante ese ambiente de bullying y de limitaciones para el desarrollo de su personalidad y el libre pensamiento, Emmanuel resistió con la amistad que construyó con un par de amigas y como mejor había aprendido a hacerlo, actuando. Los juegos que iniciaron en casa, le sirvieron como mecanismo de defensa para sobrevivir a esta etapa. Emmanuel creo un personaje que no era él propiamente. Un alter ego que buscaba no ser visto, refugiarse en el silencio para evitar que lo molestaran.
A su vez, el personaje mutaba de vez en cuando para darle rienda suelta a la expresión más pura de Emmanuel, en actos cívicos en los que se presentaba para actuar y exponer diferentes habilidades artísticas.
Así escogió su oficio Emmanuel Restrepo
Terminando su etapa en el colegio, Emmanuel debía decidir cuál sería su proyecto de vida. El niño que operaba el funcionamiento de un tren como un juego, tomó posesión un par de días y decidió que Administración de Empresas sería el siguiente paso.
El recuerdo es confuso, pero sabe tajantemente que esa idea se esfumó un día y fue reemplazada por la decisión férrea de estudiar actuación. Habló con sus papás y les contó lo que pensaba, su cercanía con el oficio dramático, cultivado en gran parte por ellos. Esto, acompañado de algo más, lo haría fuera de Medellín.
"Habían muchas ganas de salir de Medellín, de huir de ahí, no tanto de la ciudad sino de ese Emmanuel retraído construido en personaje, de explotar lo que quería hacer de mi vida y oficio", afirmó Emmanuel.
Viajó a Bogotá por recomendación de dos de sus maestros en la actuación. Llegó y liberó desde el primer día su verdadero yo. Atrás quedó el personaje tímido y callado, decidió hablar, dejar vivir sus impulsos reales.
Su salida del closet
No preparo nada para contarle a sus papás sobre su orientación sexual. La presión para hacerlo, provenía de su hermana, quien en un viaje en el que lo visitó, le preguntó sobre aquella intuición que tenía sobre él. ¿Le gustaban los hombres? Sí, dijo tajantemente Emmanuel. Ella, pidió que se lo contara en el próximo viaje a Medellín a sus papás.
Emmanuel accedió. Lo pospuso hasta el último día antes de devolverse a Bogotá. Caía la noche y la hora de comer se acercaba, le empezó un dolor de estómago persistente, quizás, el más fuerte de toda su vida. Se sentó con ellos y les dijo. Su verdad liberó cualquier dolor, se sintió más liviano y su cuerpo se hizo más sabio. Él mismo, le dio la respuesta.
Sale constantemente del closet. En cada entrevista, cada fiesta y cada momento, es liberador para él en todos esos espacios. Paso a paso sigue construyendo su libertad, hoy, de una tusa que se derivó de la ruptura de su más reciente relación, con Camila Jurado, también actriz. Acepta el amor de manera libre, con todo lo que significa, el poder estar con un hombre o una mujer le ha traído un mar de críticas hacia él, pero trabaja para darle tranquilidad a su interior. Se siente feliz con su visión del amor.
Los inicios en el teatro de Emmanuel Restrepo
En su llegada a Bogotá ingresó al Teatro Libre, disfrutó en general lo que aprendió ahí.
"Creo que ahí tuve un crecimiento personal y profesional enorme. Hoy, cuando estoy realizando mi oficio, caigo en la cuenta de que lo que estoy haciendo es gracias a esa institución. Todo lo que aprendí ahí me ayudo a desarrollar mi personalidad, tanto por los profesores y con las personas que convivía, incluso desarrollé mi conocimiento político del país, algo que había obviado siempre", dijo Restrepo.
Se formó en esa escuela de teatro, una de las principales de la capital del país para el oficio de la actuación. Sus bases son desde lo clásico, obras de Shakespear y las raíces del mismo. Logró abrir su espectro de herramientas para incluirlas en su oficio.
Así llegó a protagonizar La Primera Vez de Netflix
Tras su recorrido por las tablas. Emmanuel amplió su espectro de actuación a las pantallas. Aunque parecía un sacrilegio desde el punto de vista de sus maestros y colegas, lo hizo. Avanzó en este camino y participó de 'Yo soy Franky', una producción de Nickelodeon Latinoamérica, uno de sus primeros proyectos grandes.
Luego logró protagonizar La Primera Vez, serie colombiana de Netflix. Ahí llegó a través de un casting virtual que apareció de última hora y muy de sorpresa. A la siguiente semana, hizo otro del mismo modo, pues en ese momento estaba la pandemia. La segunda vez lo hizo con los directores de la producción y algunos de los personajes que finalmente quedaron. Pasó una semana y recibió una respuesta positiva, había quedado para protagonizar junto a Francisca Estévez esta serie.
Fue muy poderoso y emotivo, recuerda que llamó a sus papás y lloró profundamente de la emoción que representó dicho logro.
Hay que intentarlo muchas veces
"Creo que mi recorrido en la vida y esta carrera se resume en reintentar. Hay una frase, no sé de quién es pero habla de que el 90% del éxito se trata de insistir y creo que de eso va la vida", dice Emmanuel.
Con esta frase cierra la conversación sobre su vida. Se reclina hacía atrás en el asiento en el que se encuentra y exhala un poco antes de responderla. Se le ve tranquilo, calmado, como recogiendo en su cabeza la cosecha de sus logros a cuentagotas y con un ánimo pasmado, mesurado. Sonríe y agradece.
Así es Emmanuel Restrepo, transparente en sus palabras y en el éxito que define con el verbo intentar. Seguirá intentando escalar cada reto como si fuera su primera vez.