Después de celebrar la navidad, los colombianos se alertaron este lunes con un fuerte temblor que se presentó en Ciénaga, Magdalena, donde hasta ahora no se han confirmado heridos o afectados por esta situación, la cual se presentó a las 2:27 de la mañana, según el Servicio Geológico Colombiano.
Con una magnitud de 4,3 en la escala de Richter, este fuerte temblor dejó una parte del Magdalena con mucha incertidumbre, ya que se sintió bastante en la población de Ciénaga, ya que la profundidad superficial fue de 30 km, por lo que las alertas se emitieron en la población del departamento.
Otros de los lugares donde se sintió fueron Santa Marta, el norte del César, Valledupar y la Sierra Nevada, entre otros. Algunas personas también reportaron haber sentido este movimiento telúrico en Bogotá, Pereira y Barranquilla, luego de que los usuarios reportaran en las redes sociales del Servicio Geológico Colombiano.
Por ahora, no hay alerta de tsunami en el Caribe y se espera que se brinde un balance importante sobre afectaciones que puedan llegar después de este movimiento telúrico, el cual por ahora no deja heridos, ni afectaciones en la infraestructura de Ciénaga.
Escalofriante video de accidente de tractomula en la vía Ocaña-Aguachica
En las últimas horas ha estado circulando un video que ha conmocionado a los colombianos. Se trató del caso de un hombre que manejaba una tractomula y, en plena carretera de la vía Ocaña-Aguachica, perdió los frenos. El vehículo descendió por todo este trayecto y fue imposible controlarlo.
El clip fue grabado por otro conductor que iba detrás de la tractomula, quien se percató de que su compañero había perdido los frenos porque las luces rojas de stop estaban completamente encendidas, como si el hombre estuviera tratando de detenerse, aunque iba cada vez más rápido.
Como se puede observar en la publicación, el sujeto intenta maniobrar el vehículo y tomar adecuadamente las curvas de la vía, procurando ir lo más despacio con nadie y que nadie se chocara contra él. Mientras tanto, su colega le pedía a Dios que no le pasara nada grave. "Va sin frenos el compañero. ¡Dios mío, protégelo!".