Probablemente seas una de las tantas personas que preferiría escoger solamente entre el blanco y el negro, sin embargo, existen cada vez opciones para lograr llenar de satisfacción a cada una de las personas que piensa en adquirir un carro.
Y si, es verdad, estos dos colores son los que más tienen atractivo porque tienen un gran estilo, además de evitar el problema de combinar con cualquier otro color que se vea por las calles.
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Sin embargo, existen algunas consideraciones que debes tener para escoger alguno de estos dos colores, o cualquier otro, las cuales no deben estar segmentadas solamente en el estilo o lo bonito que se ven. Aquí influyen otros factores para obtener una tonalidad que realmente funcione, además de evitar gastos y costos adicionales.
Si la pintura es oscura y vives en clima caliente, no es la mejor opción
Cuando tienes un auto con un color muy oscuro, va a calentarse a la temperatura con la que impacte el sol, lo cual provocará que el interior de tu vehículo se caliente bastante y tengas que incurrir en un gasto adicional como el de proveer de gasolina tu carro, por el uso excesivo del aire acondicionado.
Para disimular el daño en la pintura, debes evitar las tonalidades muy oscuras
Cuando tenemos un imperfecto en la pintura de nuestro vehículo cuando se raya, se golpea levemente o rozamos una superficie dura, esto inevitablemente hará que se vea mucho más, siendo un tema a manejar de manera inmediata con tu taller de confianza, para evitar que el carro se vea desgastado.
Si eres de las personas que usará su carro en terreno polvoroso, mejor evita el tono oscuro
Aunque la tonalidad oscura en un vehículo oculta la suciedad, deja al descubierto todo aquello que sea superficial como el polvo o las pelusas, las cuales haría un contraste mayor en el vehículo, haciéndolo ver muy desgastado y viejo.
Con una tonalidad clara, tu auto tendrá más presencia
Está demostrado que cuando usamos un color blanco hace que resaltemos mucho más, ya que nos vemos más imponentes ante los demás, por eso, cuando utilizamos tonalidades claras, mostramos un nivel mucho más alto del que podamos tener, incluso con un carro de gama baja.
Para que tu auto se vea como un deportivo podrías usar un color primario
Entre las opciones que tendrás a tu favor están el rojo y el amarillo más hacia lo oscuro, ya que con estos dos tipos evocarás en la mente de la gente un carro deportivo, como lo hacen las grandes marcas en la industria automotriz.