Colombia tiene la fortuna de brindar una extensa variedad de destinos, dejando los museos y belleza arquitectónica un poco de lado, los paisajes naturales del país son dignos de apreciar, su diversidad de pisos térmicos, fauna y flora hacen que sea una experiencia que vale la pena vivir. Un destino que muchos no tienen en cuenta es el Parque Nacional Natural Tamá.
Es cierto que Colombia cuenta con varios parques naturales a lo largo de su geografía, unos son más populares que otros, pero Tamá es una excelente opción para aquellos que ya pasaron por los lugares más reconocidos entre la gente del común.
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Este parque tiene algo peculiar y es que representa una conectividad ecológica con el Parque Nacional El Tamá, en Venezuela, por lo que se puede decir que esta belleza natural es compartida entre ambos países vecinos, en conjunto conforman el macizo del Tamá, área protegida por las dos naciones.
En el parque natural Tamá sus visitantes podrán sorprenderse con sus paisajes exuberantes, de los que cualquier persona puede enamorarse, encontrará páramo, bosque de niebla con senderos, cascadas, camino reales antiguos y cadenas montañosas.
Como algo especial que posee este maravilloso destino es que posee una cascada que sobrepasa los 820 metros de altura, es uno de los principales atractivos del parque ya que es una de las cascadas más altas del mundo.
El parque Tamá está ubicado entre los municipios de Herrán y Toledo, en Norte de Santander, limita con la frontera Venezolana, estados de Apuré y Táchira. Su temperatura es diversa, en su base es de unos 25°, mientras que en las cimas alcanza los 6°.
Los meses más secos son entre enero y febrero, mientras que los más lluviosos son junio y julio, lo que quiere decir que no es muy recomendable visitar por esta época del año.
La fauna y flora es un punto importante al recorrer el Tamá, entre los mamíferos están: el oso negro, el piro, venados, lapas, chigüiros, zorro perruno, chácharo, báquiro, ratón de agua, nutrias, dantas, entre otros.
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En cuanto a aves, el gallito de roca, el colibrí de páramo, la gallineta de monte, el perico multicolor, el carpintero real y más. Pero si usted es una persona más amante de las plantas, podrá encontrar, frailejones, pajonales y rosetas.
En el parque natural Tamá sus visitantes podrán sorprenderse con sus paisajes exuberantes, de los que cualquier persona puede enamorarse, encontrará páramo, bosque de niebla con senderos, cascadas, camino reales antiguos y cadenas montañosas.
Como algo especial que posee este maravilloso destino es que posee una cascada que sobrepasa los 820 metros de altura, es uno de los principales atractivos del parque ya que es una de las cascadas más altas del mundo.
El parque Tamá está ubicado entre los municipios de Herrán y Toledo, en Norte de Santander, limita con la frontera Venezolana, estados de Apuré y Táchira. Su temperatura es diversa, en su base es de unos 25°, mientras que en las cimas alcanza los 6°.
Los meses más secos son entre enero y febrero, mientras que los más lluviosos son junio y julio, lo que quiere decir que no es muy recomendable visitar por esta época del año.
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