Bajar de peso, o esos kilitos de más que nos impiden tener la figura soñada, puede ser el trauma de algunos hombres y mujeres, quienes a diario buscan alternativas para combatir el exceso de grasa en sus cuerpos.
Esta problemática inicia desde la juventud, en el momento en el que buscamos la manera de lucir mucho mejor, ante los cambios hormonales que presentamos durante esta etapa, sin embargo, bajar de peso también es una necesidad de la edad adulta, en donde el objetivo continúa siendo el mismo, aunque resulta un poco más difícil ya que a medida en que vamos envejeciendo, el metabolismo tiende a ponerse más lento.
Es importante tener en cuenta que bajar de peso no puede ser un sinónimo de realizar una “dieta estricta, sino de buenos hábitos”, así lo expresa la doctora Alexandra Rada, experta en medicina estética con una trayectoria de más de 20 años.
Si lo que buscamos es adelgazar, lo primero que debemos hacer es desintoxicar el cuerpo, tal como lo explica la especialista, pues si le ponemos menos trabajo, este se puede preparar para la pérdida de grasa y los resultados serán mucho más efectivos.
“Si queremos bajar de peso, lo primero que debemos hacer es desintoxicarnos, porque estamos cansados de comer muchas veces por gula, así que vamos a dar un reposo, vamos a limpiar nuestro organismo, nuestra mente, nuestro corazón por tres días, en donde solo le daremos a nuestro cuerpo alimentos licuados”, explicó la doctora Alexandra.
La especialista recomienda ingerir batidos de frutas y verduras, sopas que incluyan pollo o pescado pero licuadas. La razón es sencilla, según Alexandra, “cuando los alimentos llegan al cuerpo, el estómago comienza a segregar ácidos gástricos, entonces los trozos de comida son muy grandes y el cuerpo segrega más ácido para poderlos degradar”, sin embargo, cuando todo entra licuado, “la cantidad de ácidos es menor y automáticamente existen menos probabilidades de tener gastritis”.
Se debe tener en cuenta que el estómago debe descansar luego de su arduo trabajo, el cual consiste en procesar toda la comida que ingresa al sistema digestivo, cuando consumimos alimentos que ya se encuentran triturados en forma de jugos, el cuerpo descansa y “se puede dedicar a reparar otros órganos, incluso rejuvenecer”.
Alexandra Rada recomienda reemplazar las comidas fuertes por licuados durante tres días consecutivos, realizando un total de cinco jugos diarios, como por ejemplo, en el desayuno: un batido de frutas con verduras, semillas de chía o linaza. De merienda: otro super batido con frutas y verduras. Almuerzo y comida: sopa de tomate, con pollo, aceite de oliva o almendras.
Esta desintoxicación le permitirá al cuerpo depurar toxinas y además prepararse para iniciar con la verdadera pérdida de peso.
