Las críticas a la postura "arrogante" de varios países europeos que se negaron a permitir que el avión del presidente boliviano, Evo Morales, cruzara su espacio aéreo, supuestamente por las sospechas de que Snowden viajaba en su aeronave, también hicieron eco en la nación más empeñada en traer de vuelta a casa al informante: Estados Unidos.
La presidenta Dilma Rousseff afirmó que "la vergüenza del presidente Morales llega no sólo a Bolivia, sino a toda América Latina". "(El caso) compromete el diálogo entre los dos continentes y las posibles negociaciones entre ellos", escribió la presidenta.
Por su parte Rafael Correa en su cuenta de Twitter trinó: “"nuestra América no puede tolerar tanto abuso. Lo que es con Bolivia, es con todos".
Según la BBC “A pesar que Francia se retractó y de las críticas a los países europeos, otros países -como Venezuela- no dejaron de culpar a EE.UU, (el país más interesado en el destino de Snowden) del "ataque" a Morales”. El mandatario boliviano amenazó el jueves en la noche con cerrar la embajada estadounidense en su país.
Para algunos analistas, el caso es por lo menos una "sacudida" a la retórica que Washington ha intercambiado con sus vecinos, en la que destaca el deseo de cooperación e integración sobre la base de "igualdad" y "respeto mutuo".
¿Termina la luna de miel de EEUU y América Latina?
Sáb, 06/07/2013 - 11:00
Las críticas a la postura "arrogante" de varios países europeos que se negaron a permitir que el avión del presidente boliviano, Evo Morales, cruzara su espacio aéreo, supuestamente por las sospec