La noticia sobre el uso del avión presidencial para transportar asistentes al cumpleaños de Eloisa, la hija menor del presidente Iván Duque, terminó en una polémica discusión entre la periodista Vicky Dávila y Hassan Nassar, consejero de Comunicaciones de la Casa de Nariño.
Las fuertes palabras de Dávila a Nassar en medio de la entrevista, no fueron ajenas a toda la controversia que generó el tema y hubo dos personajes que aparecieron entre la polémica para divertir a los internautas y asustar a otros un poco despistados.
Manuel Medrano y Hassam fueron los encargados de robarse el show en Twitter desde este martes, luego de que el popular humorista decidiera comentar sobre el uso del avión presidencial y, en broma, el cantante cartagenero le comentara simulando que lo confundía con Hassan Nassar.
Pocos entendieron que se trataba de una broma, sin embargo, Hassam decidió continuar con el hilo de sarcásticos trinos con los que más de uno quedó desubicado, por ejemplo, la excandidata al Senado por el Centro Democrático Ani Abello, quien en un comentario escribió: "¿esto es en serio?".
Incluso, Manuel Medrano utilizó el hashtag #RenuncieHassam, con el que hizo parecer más creíble la supuesta discusión que sostenían ambos personajes de la vida pública.
Ante el cuestionamiento de Abello y de muchos otros internautas que creyeron que se trataba de una verdadera pelea, el intérprete de éxitos como 'Bajo el agua' y 'Una y otra vez' decidió aclarar la situación desde su cuenta de Twitter y envió un contundente mensaje.
"Creo que en Twitter nadie entiende el sarcasmo, ni el humor", añadió Medrano.De la misma manera lo hizo al publicar una captura de pantalla en la que se lee una corta conversación entre él y Hassam, con la que demostraron que todo se trataba de un juego y que tienen una buena relación interpersonal. "Somos amigos", añadió el artista de 32 años. La broma hacia los tuiteros por parte de ambas personalidades finalizó ahí, pero Hassam ha decidido seguir publicando a aquellos despistados que poco se preocupan en corroborar la información antes de confirmarla como cierta.